Fueron 16 años donde se aplicó a Prueba de Selección Universitaria. Un mecanismo cuestionado por años por los movimientos estudiantiles, que acusaron inequidades en una prueba esencialmente enfocada en los conocimientos.
Luego de un proceso de admisión 2020 marcado por protestas en los locales y la inédita suspensión de la prueba de historia tras la filtración de una de sus fórmulas, el Ministerio de Educación anunció en marzo pasado el fin de la PSU y el camino hacia un nuevo sistema de admisión.
Mientras esto se concreta, durante los procesos de admisión 2021 y 2022 se realizará una Prueba de Transición, que considerará una menor cantidad de contenidos y medirá las competencias esenciales para el buen desempeño de los estudiantes en la educación superior.
Es por esto que la prueba que rendirán los estudiantes en enero próximo eliminó un tercio de los contenidos que, de acuerdo con la evidencia, propiciaban inequidades entre los estudiantes.
La Prueba de Transición se realizará en dos tandas, entre el 4 y 5 de enero y el 7 y 8 del mismo mes, para asegurar el distanciamiento físico entre los postulantes, producto del COVID-19. Otro de los cambios que provocará la pandemia será un menor número de preguntas, para disminuir el tiempo de permanencia en las salas.
En cuanto a las postulaciones, a diferencia del sistema antiguo donde la PSU valía al menos un 50% de la ponderación total, este año la medición tendrá un máximo de 30%, por lo que los planteles podrán priorizar otros criterios, como las notas o el ránking. Por otro lado, antes se pedía un puntaje mínimo de 450 puntos para postular a cualquier carrera. Ahora, estudiantes que pertenezcan al 10% mejor de su generación podrán hacerlo sin este criterio.
Pero también habrá cambios en los contenidos específicos de las pruebas. Este es el detalle.
De lenguaje a comprensión lectora
Número de preguntas: 65 (la PSU tenía 80)
Alternativas por pregunta: 4 (la PSU tenía 5)
Contenidos: A diferencia de la PSU, que medía contenidos y escritura, la prueba de este año solo evaluará comprensión lectora, a partir del análisis de textos literarios (narraciones-obras dramáticas), no Literarios (con finalidad expositiva y/o argumentativa) y provenientes de los medios de Comunicación.
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Matemática: menos estadística, pero más álgebra
Número de preguntas: 65 (la PSU tenía 80)
Alternativas por pregunta: 4 o 5, según el tipo de pregunta (la PSU tenía 5 alternativas en cada pregunta)
Contenidos: Salvo aspectos de nombre, los temas son los mismos. Sin embargo, habrá áreas que tendrán mayor preponderancia respecto de la PSU. Una de ellas será álgebra y funciones, que este año abarcará el 36% de las preguntas (antes era el 24%).
En cambio, geometría pasará de un 27% a un 25% del total de preguntas, y estadística representará un 22% del temario de preguntas (en el proceso anterior fue un 28%), lo que se traduce en 14 preguntas.
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Historia incluirá Formación Ciudadana
La prueba electiva de Historia mantendrá las 80 preguntas y 5 alternativas por cada una de ellas.
Donde se registrarán cambios será en los contenidos, que estarán enfocados en la historia de Chile, de América Latina y del Mundo, además de economía, sociedad y territorio.
La principal novedad radicará en la inclusión de preguntas del área de Formación Ciudadana (educación cívica).
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Ciencias con algunos cambios en Biología y Física
La prueba electiva de Ciencias mantendrá las 80 preguntas y 5 alternativas por cada una de ellas. Los cambios estarán en la composición de las tres secciones que componen el test.
Biología: se eliminan contenidos de biología humana y salud
Física: se eliminan preguntas relativas a macrocosmos y microcosmos
Química: se mantienen las áreas de estructura atómica, química orgánica y reacciones químicas evaluadas en 2019.
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