Existen diversos métodos para la prevención del VIH, virus que puede ocasionar el SIDA, y uno de ellos es la PrEP (profilaxis pre exposición), impulsado por el Ministerio de Salud (Minsal) y dirigido principalmente a aquellas personas cuyas prácticas sexuales podrían exponerlas en mayor grado al virus.
Si bien la PrEP no previene otras infecciones de trasmisión sexual (o ETS), es un tratamiento que reduce las probabilidades de adquirir VIH.
¿En qué consiste la PrEP?
Este tratamiento preventivo para el VIH consiste en la toma de un medicamento para reducir el riesgo de adquirirlo.
Este tratamiento es recomendado en aquellos casos en los que las personas tienen conductas de riesgo reiteradas, pero es importante recalcar que no previene otras infecciones de transmisión sexual; como gonorrea, condiloma acuminado, herpes, infección por Chlamydias, sífilis o infecciones vaginales. Frente a esto, el llamado del Minsal es a utilizar condón.
Seguir este tratamiento implica respetar dosis y horarios, realizarse exámenes, acudir a control médico cada tres meses y estar bajo la supervisión médica.
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También hay que considerar que, si bien existe un riesgo de efectos secundarios, estos son leves y desaparecen por lo general al mes de iniciar el tratamiento. En caso de presentarlos, se debe acudir a un equipo de salud.
¿Cómo acceder a la PrEP?
Su acceso está disponible en el sistema público de salud, de manera gratis, a través de Fonasa y/o PRAIS (Programa de Reparación y Atención en Salud).
