No sólo a nivel nacional, más bien en todo el mundo, las pesquerías atraviesan un escenario complejo. Ya sea por un estado de sobreexplotación de los recursos o derechamente porque han visto colapsada su actividad.
En Chile, la preocupación por la crisis de la Merluza aumenta. Este pez carnívoro, integrado en el ecosistema marino, se exporta principalmente hacia Estados Unidos, Alemania, Venezuela, Australia, Brasil, España y es explotado tanto por la pesca artesanal como por la industrial.
Se vende en variedad fresca-refrigerada, congelada y mide –en promedio- 35 centímetros.
Desde la ONG internacional, (especializada en temas ambientales) World Wildlife Fund (WWF) –en Chile-, explicaron a T13.cl que existen -entre otros- cinco factores que mantienen en crisis la existencia de este pez:
1. De los principales 38 stocks de pesca agrupados en unidades de pesquería, casi la mitad están siendo explotados a niveles que no son sustentables: ocho se encuentran sobreexplotados y otros ocho están en estado de “colapso”, entre los que se encuentra la merluza común chilena (Merluccius gayi gayi).
2. La sobrepesca que ha afectado históricamente al recurso, así como la pesca incidental, es decir, “se captura merluza por accidente en otras pesquerías”.
3. La pesca ilegal de Merluza.
4. Tendría además una fuerte influencia en esta crisis, la ausencia de un enfoque ecosistémico en el manejo pesquero.
5. Adicionalmente, un factor natural es la abundancia de jibia, que es un depredador de la merluza.