Sergio Duran y Francisco Sepúlveda son padres cuidadores de un bebé hace un año, como parte del Programa de Familias de Acogida Especializada (FAE) de la Región de Valparaíso.
Fue durante la primera semana de junio cuando la coordinación del FAE les explicó que, por resolución del Juzgado de Viña del Mar, debían entregar al menor.
Según dijeron ambos padres cuidadores, “la coordinadora nos amenaza diciendo que van a hacer el cambio del cuidado del gordo, porque ella es la que tiene la tuición legal y si se les antoja la van cambiar”. Tras esto, el director regional les aseguró que no se preocuparan, pues tenían una buena evaluación.
Al ser amenazados, aseguran, optaron por tomarse un tiempo. “Ese día, Francisco se quedaba en Viña y yo me iba, entonces yo llego, les pido al niño, me lo pasan. Les pido que me abran para irme y me abren. No había nada malo ahí”, asevera Sergio Durán.
El día lunes, dice Durán, pretendía ir a hablar con el director regional personalmente, pero cuando iba en camino, se enteró que intimidaron a Francisco por haberse ido con el menor.
“Nosotros no estamos prófugos como lo decía Francisco, ni nada por el estilo. No estamos citados a declarar, lo que sí estamos un poco resguardados, porque es nuestra manera de proteger a alguien que no tiene cómo protegerse”, sostuvo Durán.
Respecto de una posible adopción del bebé, Sepúlveda asegura que actualmente no tiene la posibilidad de adoptarlo en estos momentos. “Lo que nosotros queríamos era que se nos considerara en la adopción una vez que estuviera susceptible de adopción", precisó.