El Papa Francisco confirmó en una entrevista con la agencia Reuters que pese haber aceptado la renuncia de tres obispos chilenos -incluyendo a Juan Barros- todavía podría haber novedades.
"Todavía tengo que aceptar la renuncia de dos (obispos) que han excedido el límite de edad. Pero tal vez haya alguien más cuya resignación voy a aceptar. En un caso, pedí que se le den las acusaciones para darle la posibilidad de defenderse de las acusaciones y luego veremos", afirmó el Sumo Pontífice.
En la misma entrevista el Papa fue consultado sobre el rol de Francisco Javier Errázuriz, quien es sindicado por la víctimas de Fernando Karadima como uno de los principales encubridores del caso. Sobre él y su participación del G-9, dijo que esta "no es un honor, es un trabajo".
"No quiero entrar en el juego de cortar cabezas y buscar chivos expiatorios", agregó el Papa, quien manifestó que los hechos de abuso sexual, de poder y conciencia ocurridos en la iglesia chilena son "obra del espíritu del mal".
Desde su visita al país en enero de este año, el Papa Francisco ha emprendido una serie de acciones para investigar y reparar a las víctimas de abusos en Chile. De manera inédita citó a todos los obispos chilenos para una serie de jornadas reflexivas en el Vaticano que terminaron con todos ellos presentando su renuncia.
De momento el Papa sólo ha aceptado las de Juan Barros (Osorno), Gonzalo Duarte (Valparaíso) y Cristián Caro (Puerto Montt).