El arzobispo de Malta y secretario adjunto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, Charles Scicluna, indicó en una entrevista con el medio católico Crux, que la investigación de los abusos sexuales cometidos por el clero chileno "abrió una caja de pandora".
"Hay una serie de casos que están siendo revisados. El material que se nos entregó durante las dos misiones en Chile es tremendo, y cada caso debe ser estudiado por sus propios méritos y debe pasar por su debido proceso", indicó el prelado de Malta.
“Creo que hay signos de esperanza, incluído este ‘servicio de escucha’ abierto por los obispos chilenos es un servicio importante, dirigido por personas que merecen confianza y son competentes. Este es un signo de esperanza muy importante para la Iglesia en Chile”, complementó Scicluna.
"Pienso que la conciencia trae responsabilidad y confrontar la verdad tiende a ser traumático, pero solo la verdad nos liberará. Y esa es mi mayor esperanza y oración para Chile. Un país bendecido por santos, como Alberto Hurtado, y Teresa de los Andes, y Francisco Valdez (sic)... Les rezo a menudo", agregó el sacerdote.
Scicluna también se refirió a los obispos chilenos que renunciaron y cuyos casos no han tenido un debido seguimiento: “No tengo conocimiento de ningún proceso, pero eso es porque no sigo cada uno de los casos. No tengo información para confirmar o negar. Yo abrí la tapa, pero otras personas tendrán que limpiar el desorden”, concluyó.