Luego de que las diputadas Camila Vallejo (PC) y Karol Cariola (PC) señalaran que en el Hospital de La Florida habría "gusanos en la comida", el Colegio de Nutricionistas Universitarios de Chile, aseguran que se debe supervisar las centrales de alimentación de los hospitales públicos, porque "hoy se toma esta área como algo secundario".
Es más, los profesionales consideran que "varias centrales de alimentos deben ser cerradas", para proteger la salud de los pacientes.
Por su parte Samuel Durán, presidente de la entidad, "los recintos asistenciales no cumplen con las normas de construcción en las centrales lo que lleva finalmente a una mala entrega, o a una entrega insuficiente y de mala calidad", cuestiona.
"Esto es culpa básicamente del Ministerio de Salud y de la autoridad sanitaria, que no lo fiscalizan, siendo que la alimentación es un bien básico y necesario", aclara.
El profesional agrega además, que en muchos casos se trata de empresas externalizadas: "No existe un vínculo real con el hospital, ni mucho menos con los enfermos que son quienes reciben la alimentación", denuncia.
