Una mujer fue rescatada desde un pique minero en Alto Hospicio, en la Región de Tarapacá, luego de una intensa búsqueda que se prolongó durante una semana.
Rosa, de 28 años, desapareció el pasado domingo 22 de septiembre, luego de salir desde su trabajo para comprar almuerzo.
Tras una semana de búsqueda, el 29 de septiembre, una vecina avisó a bomberos que escuchó los gritos de una mujer, justamente en la zona de los antiguos piques mineros de Huantajaya, en pleno desierto.
La mujer fue encontrada al fondo de un pozo de más de 10 metros de profundidad.
Marco Opazo, superintendente de bomberos de Alto Hospicio, detalló que “se encontraba deshidratada con hipotermia y con un poco de inconsciencia”.
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“Ella tuvo que tomar su propia orina para poder sobrevivir, eso es lo que nos comentó”, dijo la fiscal de Alto Hospicio, Jocelyn Pacheco.
Sin embargo, la víctima declaró no recordar cómo llegó al lugar.
“Con el Ministerio Público se están realizando todas las diligencias investigativas para establecer la forma, las circunstancias y la dinámica de cómo esta mujer llega a este lugar”, enfatizó el teniente coronel Cristian Candia.
Mujer estuvo en pique minero durante una semana
La mujer extraviada trabajaba como guardia de seguridad. Aquel 22 de septiembre, habría salido de su trabajo para comprar almuerzo.
Al día siguiente, su pareja con quien tiene un hijo de ocho años, puso una denuncia por presunta desgracia.
“La pareja se comunica con nosotros por intermedio de la hermana de él, nos dice que desapareció, nosotros empezamos a buscar información y empezamos a preguntarle los horarios de sus turnos, lo que hacía, dónde se había visto, lo cual le costó responder a ella y nos bloqueó los contactos, no nos pudimos comunicar ni saber nada más”, dijo Cristian, hermano de Rosa.
El pasado domingo, la mujer fue rescatada con vida. Habría trepado hasta la mitad para pedir ayuda cuando una persona la escuchó y dio aviso.
“Ella logra trepar, hace una excavación a mano desnuda y se posiciona en una saliente, en una deformación de las rocas, en una superficie no superior a los 50 centímetros cuadrados, donde queda ahí a la espera de la ayuda. Lo último que recuerda era que había ido a comprar almuerzo”, declaró el superintendente de bomberos.
