Las propuestas de la Cámara de Comercio para modificar la ley de etiquetado de alimentos
Las propuestas de la Cámara de Comercio para modificar la ley de etiquetado de alimentos
Este martes la Cámara de Comercio de Santiago (CCS) emitió un documento en el que entrega propuestas para modificar la actual Ley de etiquetado de alimentos.
Luego de la reunión en la que participó el presidente de su Comité de Importadores, Dionisio de la Cerda y la Jefa de Departamento de Nutrición y Alimentos del Ministerio de Salud Lorena Rodríguez, la entidad reveló que la actual ley presenta “verdaderas barreras para-arancelarias para la importación de alimentos”.
Destacan, en esta materia, la obligación del doble etiquetado, ya que “aparte de la duplicidad de costos, se genera una pérdida de tiempo en la disposición para venta del producto, ya que hay que esperar que el producto se etiquete nuevamente", explicó la CCS.
Además, "muchos proveedores extranjeros se resisten a asumir el doble etiquetado por lo que, en la mayoría de los casos, el proceso se debe realizar en el país”. En consecuencia, muchos de los importadores han optado por dejar de enviar sus productos.
Al respecto, en el marco de la revisión de la Ley 20.606, la Cámara de Comercio de Santiago planteó cuatro modificaciones al cuerpo legal:
- Que los importadores de productos alimenticios envasados en origen, puedan adherir sus etiquetas nutricionales en la parte de atrás de las etiquetas del producto.
- Que las cajas de regalo de chocolates y todas las barras con contenido de cacao sobre el 50% puedan eximirse de la colocación de los signos “Alto En”.
- Que para efectos de la exigencia de agregar los signos “Alto En” de las etiquetas, se midan los nutrientes por porción y no por 100 gramos.
- Que se pueda colocar los signos “Alto En” en la misma ubicación de la información nutricional. De esta manera se contribuiría a que el consumidor consulte en la parte posterior toda la información relevante.
Dentro de los fundamentos de las propuestas, la entidad mencionó el caso de “grandes y prestigiosas empresas transnacionales de productos alimenticios, que están en serias dificultades para comercializar sus productos en Chile. Algunas de ellas, con casi 20 años de presencia en el mercado nacional, decidieron abandonar el país porque quedaron en situación desmedrada con respecto a la competencia local”.
