"Fui vocero de la precariedad del Estado y he sufrido las consecuencias", estas son parte de las palabras que pronunció el ex sub secretario del Interior, Patricio Rosende, en la audiencia que suspendió el juicio oral en su contra por la alerta fallida de tsunami del 27 de febrero de 2010.
Este jueves, el 7º Juzgado de Garantía resolvió acoger el acuerdo suspensión condicional del proceso propuesto por el Ministerio Público y no se proseguirá con un juicio oral contra los cuatro imputados del caso. Aunque los abogados de las víctimas anunciaron que apelarán.
Además de Rosende, eran perseguidos en esta causa la ex directora de la Onemi, Carmen Fernández, el jefe del Centro de Alerta Temprana de la Onemi, Johaziel Jamett y los marinos del SHOA (repartición de la Armada encargada de levantar las alarmas) Andrés Henríquez, Mariano Rojas y Mario Andina.
En conformidad con el acuerdo alcanzado, los imputados leyeron sus disculpas de manera pública:
Rosende: "Lamento como el que más, las pérdidas de vidas que no pudimos salvar"
Patricio Rosende comenzó su alocución señalando que "los daños ocasionados por el terremoto de 2010 a toda nuestra infraestructura estatal y privada fueron devastadores".
Luego prosiguió diciendo que este "no sólo produjo un colapso total en nuestras capacidades de comunicación y reaccion sino que reveló nuestra precariedad como Estado".
"Creo haber hecho lo humanamente posible dadas las condiciones de ese momento para enfrentar la mayor catástrofe que ha conocido Chile en magnitud y población afectada", añadió.
Si mis acciones contribuyeron a que se cometiera un error, lo lamento sinceramente y pido disculpas por aquello
Después narró que su único propósito durante esa madrugada de 2010 fue "ayudar a las personas que estaban sufriendo y salvar vidas". No lograrlo, continuó, "me ha provocado en lo personal un profundo dolor y frustración y lamento como el que más las pérdidas de vidas que no pudimos salvar".
"Las consecuencias de esta catástrofe son imborrables y el dolor me acompañará por siempre. Fui vocero de la precariedad del Estado y he sufrido las consecuencias", dijo.
"Concurro a la propuesta del Ministerio Público con la esperanza de que los familiares de quienes murieron puedan tener el consuelo de que el Estado reconoce en la voz de sus representantes la incapacidad para reponerse con rapidez a la inquietud de la catástrofe...si mis acciones contribuyeron a que se cometiera un error, lo lamento sinceramente y pido disculpas por aquello", cerró.
Fernández: "Vivo esta pesadilla con dolor e impotencia"
Tras Rosende, fue el turno de Carmen Fernández, quien visiblemente emocionada, declaró que su propósito en la audiencia era "expresar a las víctimas del tsunami de febero de 2010 cuan profundamente lamentó lo ocurrido con varios compatriotas que perdieron su vida esa fatídica madrugada".
"Aquella noche no obstante el total colapso, especialmente el comunicacional, que vivimos y también incluyó Onemi, creo haber desarrollado todos los esfuerzos para ir en ayuda y protección como siempre antes actué", explicó.
Errores comete todo el mundo y puedo no estar excenta de ello
Luego dijo, "si ello hoy se puede ver como insuficiente, quiero decir y reiterar que lo lamento honestamente. Porque errores comete todo el mundo y puedo no estar excenta de ello".
"Esta catástrofe fue una cuestión del todo excepcional que pudo haber exigido una respuesta distinta del Estado y sus propios agentes, dentro de los que estaba incluida, si aquello —no obstante mis esfuerzos de aquel día– se ve así, pido excusas.
"Por muchas razones vivo esta pesadilla con dolor e impotencia como ustedes no se imaginan. Pero estoy cierta que ello jamás podrá compararse con el dolor de las víctimas. A quienes doy mi acompañamiento pidiendo que sean acogidas estas palabras como gesto honesto de quien jamás quiso un resultado dañino de ninguna naturaleza a las personas, a cuyo servicio he dedicado practicamente toda mi vida", concluyó
Las declaraciones del resto de los imputados
Johaziel Jamett, ex jefe de Alerta Temprana, destacó que el teremoto fue el segundo más potente que ha vivido el país y dijo que "vino a desnudar la precariedad que teníamos como país" para este tipo de eventos.
Además, se describió "abatido de todo cuanto ocurrió".
Mariano Rojas, ex director del Servicio Hidrológico Oceanográfico de la Armada, dijo que sus disculpas "no mitigarán el dolor de quienes perdieron a seres queridos" y reiteró a nombre de los integrantes del SHOA que "pusimos todo el esfuerzo y compromiso en cumplir con nuestro deber de la mejor manera que estuvo a nuestro alcance".
En la misma línea, el marino Andrés Rojas señaló que "coloqué todo mi esfuerzo y capacidades para minimizar las consecuencias" de la catástrofe.
Mario Andina, por su parte, expresó que "sin duda no estabamos suficientemente preparados como país para esto".
