Un diálogo "sin exclusiones". Ese fue el llamado que hizo el ministro de Justicia, Hernán Larraín, a los funcionarios de Gendarmería, quienes dieron un ultimátum a La Moneda.
En medio de la amenaza de un paro nacional de 24 horas, Larraín envió una carta a los gendarmes. En ella asegura que el gobierno ha estado "abierto al diálogo" para escuchar las demandas de los funcionarios. "Compartimos la necesidad urgente de trabajar por la modernización de gendarmería, no a propósito de la movilización de los gremios, sino desde el primer día en que asumimos", asegura.
"En la misma línea, coincidimos en que -en muchos casos- nuestros gendarmes, así como los internos, han sufrido y sufren abandono, situación que se ha extendido por décadas y por ello, la institución requiere una reforma profunda", enfatiza en la carta.
En este sentido, señala que "sabemos que Gendarmería está realizando honestamente una compleja labor en condiciones muy difícil. Queremos manifestarles que sentimos que sus problemas son nuestros problemas".
En la misiva Larraín dice "comprender" la inquietud que existe por la situación del sargento segundo Héctor Rojas, quien se encuentra en prisión preventiva en el marco de la investigación por torturas a los imputados por el asesinato en el Barrio República. Según la fiscalía, el funcionario no dio alerta frente a los apremios que ocurrieron en el módulo que tenía a cargo.
"Consideramos que no se pueden hacer juicios anticipados, rechazamos las condenas institucionales y recordamos que la presunción de inocencia le asiste también al gendarme imputado. La dirección nacional está preocupada por esta situación", remarcó.
Llamado a formar parte de mesa de trabajo
Es por ello que Larraín hace un llamado a los gendarmes a sostener un diálogo con su autoridad, la directora nacional Claudia Bendeck, "quien ha sido especialmente mandatada por este gobierno para trabajar en la reforma y en el mejoramiento de las condiciones de la institución".
En este sentido, detalla que se le encomendó a Bendeck presentar un informe respecto de estos objetivos, el que incorpore las inquietudes que los gremios de gendarmería han hecho presentes. Este informe, dice Larraín, deberá ser entregado "en un plazo breve y razonable", para lo cual convocará "lo antes posible" a los funcionarios para iniciar este trabajo.
"Para nuestro gobierno el camino para enfrentar los problemas es el diálogo, sin exclusiones. Luego de concluido este informe abriremos nuevas instancias de encuentro y trabajo conjunto para procurar su posterior implementación", finaliza.