A las 11:00 horas, en punto, la cuarta edición de La Cumbre del Rock Chileno comenzó con las primeras presentaciones de los músicos locales. Pasaron Julius Popper, We Are The Grand y Sexual Democracia, entre otros, los que recibieron el caluroso abrazo del público y del inclemente sol de enero en la capital.
La mañana requirió de mucho bloqueador y sombreros. Incluso, los asistentes que se ubicaron en cancha quitaron parte del soporte de cartón que cubría el pasto para forzar algo de sombra.
Solucionado algo del problema, arriba de los dos escenarios dispuestos en el recinto de Ñuñoa (Rojo y Azul), comenzaron a sucederse ovaciones y también homenajes a Jorge González.
Porque Alex Anwandter dijo no adherir al "club de hombres" llamado rock y LÓPEZ (dos quintas partes de Los Búnkers) revivió por un momento a su ex banda con "Quién fuera", el cover de Silvio Rodríguez que rescataron cuando aún eran quinteto.
Y, por otra parte, Gonzalo Yáñez recordó su camino junto al hombre de "Fe" mientras Weichafe ejecutó una electrificada versión de "Estrechez de corazón".
Entrada la tarde, Javiera Mena dispuso de los mejores hits de su último disco "Otra era" (2015) al servicio de la fiesta nacional. Pero la mujer que se llevó de manera indiscutida las loas de los fanáticos fue Mon Laferte.
El alter ego de la artista chilena Montserrat Bustamante demostró por qué es uno de los actos más aclamados de México, país en el que reside actualmente.
Baladas de amor sufrido, también coqueto, y una gran puesta en escena -que incluyó una orquesta de bronces- fueron el sello de su presentación. Para el final quedó su éxito indiscutido llamado "Tu falta de querer".
Todo, a la espera del adiós de Jorge González.