La Corte de Apelaciones de Santiago decidió de forma unánime que la empresa Movistar realizó "acoso telefónico" a uno de sus clientes, luego que éste presentara un recurso de protección contra la compañía tras recibir por meses llamados por una supuesta deuda.
Francisco Bravo, fiscal de Linares, era el cliente. Bravo contrató el servicio de la compañía para su hogar (telefonía, televisión e internet). Según el fiscal, luego de cambiarse de domicilio la compañía no aceptó trasladar también sus equipos.
Tras ello, Bravo suspendió el servicio, pero por cerca de dos meses recibió llamados telefónicos a su celular. Allí le pedían que pagara por los equipos que no estaba utilizando.
“Es común que ocurran estas gestiones. Llaman todos los días a personas en horarios que interrumpen el desempeño laboral", señaló a T13 Francisco Bravo, el cliente afectado.
En el fallo del tribunal de alzada se consideró que el modo de cobranza de la empresa fue ilegal, irracional y arbitrario.
"Debe recurrirse a los procedimientos ordinarios de cobranza judicial, bastando con poner en noticia del deudor la existencia de la obligación impaga, sin que tenga justificación bajo ningún aspecto incurrir en un verdadero acoso telefónico a un deudor, al margen de todas las oposiciones que aquél pueda realizar legítimamente en el procedimiento de cobro judicial de la deuda", sostiene la resolución.
