El gobierno ingresó el lunes al Congreso el proyecto de Ingreso Familiar de Emergencia, que tendrá discusión inmediata en el Poder Legislativo y que busca ayudar económicamente a los hogares que no posean ingresos formales y que pertenezcan a los estratos socioeconómicos más bajos.
El objetivo es ir en ayuda de aquellas personas que trabajan de manera informal y que han visto reducido sus ingresos, o no han podido trabajador durante las últimas semanas por la pandemia del coronavirus que tiene parcialmente paralizadas las actividades del país.
A quiénes beneficia
El ministro de Desarrollo Social y Familia, Sebastián Sichel explicó que el Ingreso Familiar de Emergencia beneficiará a “los hogares mayoritariamente informales más afectados por el COVID-19”. Esto quiere decir aquellos que no posean ingresos formales como contrato formal en una empresa o institución, ni trabajadores a honorarios, que boletean.
Pese a que desde el gobierno aclararon que los trabajadores con ingresos formales pueden acogerse a otras medidas que se están impulsando para proteger los ingresos, esta normativa podrá incluir a quienes registren algún ingreso formal, pero bajo.
En este caso también se trata de familias que viven en una situación de alta vulnerabilidad durante la emergencia, pero que además de sus ingresos informales reciben, por ejemplo, una pensión baja o una boleta de bajo monto, explicaron desde el gobierno.
Cuánto será el beneficio
Desde el ejecutivo aseguraron que el ingreso dependerá de la cantidad de personas que integren el hogar y de la situación socioeconómica de cada familia.
Para el hogar integrado por cuatro personas, el bono alcanzará los 260 mil pesos siempre y cuando ninguno de los integrantes tenga ingresos formales, y que la familia pertenezca al 40% más vulnerable de Chile durante la emergencia.
“El monto de este ingreso dependerá del tamaño del hogar y de la situación socioeconómica de la familia, disminuyendo el aporte entregado a medida que disminuya la vulnerabilidad de los hogares. Para los hogares parcialmente informales sólo serán beneficiarios los que pertenezcan al tramo de mayor vulnerabilidad (0-40%)”, dijo el ministro Sichel.
Este aporte no sufrirá ningún descuento, sin embargo, irá disminuyendo a medida que pasen los meses de pandemia. El primer mes, el hogar recibirá el 100% del beneficio, los 260 mil pesos en el caso de la familia ejemplificada; el segundo mes el ingreso será del 85% ($208 mil en el mismo ejemplo), y el tercer mes un 70 por ciento, lo que equivaldría a 182 mil pesos.
“La idea es ir disminuyendo el aporte a medida que se normaliza la actividad económica y los hogares vayan aumentando la generación de sus propios ingresos e ir transitando a otro tipo de apoyos como podrían ser subsidios al empleo”, explicó Sichel.
