Este sábado, usuarios de redes sociales notificaron que el sistema privado del Ejército de Chile habría sido hackeado, luego de que el grupo Anonymous anunciara a través de su cuenta de Twitter, que tenían más de 2,34 gigabytes de información de la institución militar.
Según detalla la publicación, la información correspondería a movimientos internos de altos mandos de la institución que fueron expuestos en un documento.
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En respuesta a lo sucedido, la institución a través de un comunicado confirmó la filtración de datos e indicó que se activaron los protocolos de seguridad "disponiendo las medidas técnicas correspondientes para evitar nuevos actos de esta naturaleza, labor que continúa en desarrollo".
Asimismo, afirmaron que "las cuentas de correo electrónico afectadas son proveídas por una empresa externa, siendo empleadas principalmente para relacionarse, compartir y/o enviar y recibir antecedentes con proovedores o instituciones de regular relación con el Ejército".
Por otra parte, sostuvieron que el acceso indebido que se hizo a esas cuentas no afectó los sistemas de información computacional que utilizan para el cumplimiento de sus funciones constitucionales.
Finalmente, aseguraron que dieron inicio a un peritaje informático para aportar a la justicia los antecedentes que correspondan.
Esta situación, se suma al masivo hackeo realizado a Carabineros el pasado 29 de octubre, en que quedaron expuestos más de 10 mil archivos, incluidos datos de inteligencia, detalles de armamento de algunos grupos y monitoreo a personas catalogados como "blancos de interés".