El Ministerio de Economía y el Instituto Nacional de Estadísticas informaron que postergaron la realización del Censo de Población y Vivienda previsto para 2023, para el primer semestre de 2024 (marzo-junio).
“La postergación de este Censo de derecho obedece a razones técnicas derivadas en gran parte por la situación sanitaria del país en relación con la pandemia del COVID, que no ha permitido realizar un plan de pruebas exhaustivo para garantizar un buen proceso de implementación del levantamiento del Censo”, detallaron desde el gobierno.
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Desde el INE y el Ministerio de Economía destacaron que el Censo es una tarea país, que entrega información relevante sobre la cantidad de personas que habitan nuestro territorio y su caracterización.
“Éste requiere de un trabajo de diseño, preparación y testeo para reducir al mínimo eventuales inconvenientes de la labor de implementación del trabajo de campo, con el objeto de asegurar la máxima calidad y confiabilidad a los datos que perdurarán hasta el próximo Censo; datos que son fundamentales para la adecuada toma de decisiones, tanto en el ámbito de las políticas públicas como para decisiones del ámbito privado. El Censo precisa de la participación y colaboración de todas y todos: sociedad civil, instituciones públicas, sector privado y la ciudadanía”, dijeron a través de un comunicado.
“La decisión de postergar el Censo de Población y Vivienda para el primer semestre de 2024 fue respaldada de manera unánime por las y los integrantes del Comité Asesor para el Censo, quienes se reunieron con el INE y el Ministerio de Economía el 23 de mayo. Esta visión del comité ya había sido planteada en su reunión del 26 de abril, cuando tal consejo recomendó la necesidad de aplazar el levantamiento dado que no era factible su aplicación en abril-junio de 2023”, agregaron.
Recordemos que el último censo realizado en Chile, en 2012, tuvo problemas de obtención y tratamiento de datos, por lo que tuvo que ser complementado con otra consulta en abril de 2017.
Desde el INE aseguran que los datos obtenidos en aquella medición son útiles para el tratamiento de políticas públicas hasta el 2025, por lo que es necesario realizar un nuevo censo, pero que los plazos permiten aplazarlo aún.