Unos 35 millones de visitantes ha tenido el parque de diversiones en Fantasilandia desde su inauguración el 28 de enero de 1978 en el Parque O'Higgins.
Por eso es que el anuncio de su cambio de locación a la comuna de San Bernardo no ha dejado indiferente a nadie, considerando la historia que ha acumulado el lugar en Santiago durante las últimas cuatro décadas.
Si bien actualmente cuenta con cerca de 40 atracciones en sus 55 mil metros cuadrados de espacio, en sus inicios la situación del parque era muy diferente.
Solo habían ocho juegos, de los que destaca uno que se convirtió en furor en la década de los 80 y los primeros años de los 90: el Pulpo: "Fue uno de los primeros cinco juegos que llegó de España y lo fabricó la empresa Rouble Bous que ya no existe. Hace cuarenta años no había juegos que se movieran así, el Pulpo revolucionó Chile. Fue un hito en Santiago, porque en esa época casi nadie viajaba, era toda una novedad", explicó a La Segunda Olivia Nasser, quien trabaja en el parque desde hace 25 años.
La llegada del clásico juego fue rememorada por Gerardo Arteaga, gerente general del parque e hijo del fundador del mismo nombre en el libro que se publicó para conmemorar los 40 años de Fantasilandia.
"Habíamos ido a buscar a mis papás al aeropuerto e íbamos de regreso a nuestra casa cuando, en la avenida Pajaritos nos encontramos con una fila de camiones que llevaban los juegos a Fantasilandia. Nos bajamos y pude ver desarmados al Pulpo y el Century 2000. Estaba encantado con esas máquinas enormes, gigantescas, que eran como unos Transformes que se subían solos arriba del camión y se podían trasladar", recordó.
En el mismo texto, Artega dijo que el Pulpo era muy difícil de maniobrar ya que era manual: "Tenía una secuencia lógica, cada movimiento del juego dependía de una llavecita que había que mover, por eso era súper entretenido de manejar. Este tipo de juegos hoy ya no existen, es el computador el que hace el ciclo del juego con tan solo apretar un botón", explicó.
Pero, ¿qué ocurrió con el Pulpo? El juego fue vendido hace cerca de 25 años debido a que había "cumplido un ciclo", aunque Arteaga asegura que su objetivo es que vuelva al lugar donde tanto éxito tuvo: "Sueño con volver a tenerlo dentro de las 40 atracciones del parque. Lo vendieron a un parque itinerarnte, por lo que debe andar ahí de playa en playa", dijo.