Un estudio realizado por la Superintendencia de Salud reveló que las clínicas manejan hasta 200 tarifas diferentes para un mismo procedimiento. El análisis fue realizado considerando los precios que las isapres le pagaron a los prestadores privados.
La investigación mostró también que los precios eran heterogéneos. Es decir hay más de un 20% de variación en los valores respecto a su promedio. Un ejemplo de esto fue el examen que se utiliza para detectar la diabates realizado en el Hospital Clínico de la Universidad Chile a una persona hospitalizada y que cuenta con una isapre que no tiene convenio con el prestador. En este caso los valores fluctuaron entre lso $780 y los $72.090, es decir, hubo un 431% de variación.
La misma prueba, en el mismo prestador y sin convenio pero realizada de forma ambulatoria reveló que los precios variaron entre los $920 y los $1.830, es decir, hubo una variación del 27%.
Respecto del punto anterior el presidente de la Asociación de Isapres, Rafael Caviedes indicó que "la heterogeneidad de precios es un tema que debe ser vigilado, pero con herramientas que permitan comparar calidad y resultados. En Chile, el resultado clínico es un misterio. ¿Cuántos pacientes se rehospitalizan, mueren o requieren otros tratamientos? ¿Cuál es la tasa de éxito en una intervención quirúrgica? No hay información relevante de los resultados clínicos, ni tampoco de los precios que cobran los prestadores”, concluyó Caviedes.
El anális concluyó que los precisos de este tipo de prestaciones deben ser más transparentes y que frente a la falta de regulación que hay en los prestadores privados, "resulta razonable suponer -al menos teóricamente- que los incentivos de los prestadores se orientarán a establecer políticas de discriminación de precios, captando con ello la mayor parte del excedente del consumidor, maximizando de esta manera sus beneficios", según consigna La Tercera.
Respecto del estudio, el superintendente de Salud, Sebastián Pavlovic sostuvo que el estudio corresponde a un intento por transparentar y "generar una discusión para mejorar las regulaciones del sistema de salud".
El ex ministro de Salud y ex director de la Clinica Las Condes no se vio sorprendido por los datos que aporto el estudio y señaló que “estas diferencias de precios no pueden explicarse sólo por una diferencia en los costos. Aquí ha habido oportunidades comerciales, planes de salud, coberturas y negociaciones, que hacen, en la práctica, que cada plan de salud y cada aseguradora tenga para el mismo examen y para el mismo prestador, precios muy diferentes”, sostuvo el médico.
Las clínicas se defienden
El superintendente de Salud, Santiago Pavlovic señaló que "muy probablemente las clínicas van a decir que esto no es así, pero los datos están ahí. No es que mandemos fiscalizadores a preguntar valores a las clínicas, sino que tienen que ver con precios que las propias isapres nos reportaron que habían pagado por las prestaciones", señaló.
La Clínica Santa María, por su lado, indicó que “para el examen hemograma en pacientes no preferentes hospitalizados sólo se registran siete precios distintos, cuya diferencia entre el más alto y el más bajo es de $ 1.061, lo que se debe principalmente a las condiciones de reajustabilidad pactadas con las distintas aseguradoras en convenio”, aseguraron desde el prestador.
Por su lado, la Clínica Alemana aseguró que "por política comercial, nunca se ha cobrado un arancel distinto para un mismo examen por el hecho de que éste se realice de manera hospitalizada. Las diferencias que arroja el estudio podrían obedecer a descuentos que emanan de los convenios suscritos con las aseguradoras y al convenio Todo Alemana", explicaron.