Qué se sabe de Yolvi González, el imputado por el crimen del teniente Sánchez y su posible conexión con el secuestro de Ronald Ojeda

Qué observar. Yolvi Miguel González Arcaya, el ciudadano venezolano de 21 años actualmente en prisión preventiva como presunto coautor del homicidio del teniente de Carabineros Emmanuel Sánchez ocurrido el 10 de abril, guardaba en su celular una fotografía que podría conectarlo con el secuestro y asesinato del teniente en retiro del ejército venezolano Ronald Ojeda.

• Chilevisión noticia publicó el jueves una fotografía suya con un traje de la Policía de Investigaciones (PDI), la que habría sido tomada días antes de que el oficial disidente del régimen de Nicolás Maduro fuera sacado por falsos policías desde su departamento en la comuna de Independencia, al norte de Santiago, el 21 de febrero.
• Los restos del oficial venezolano serían encontrados en una maleta cubierta por cemento en una toma de Maipú, al poniente de Santiago, el 1 de marzo. Tenía 32 años. Su certificado de defunción consignó como causa de muerte, “asfixia por suspensión”.
• Por el crimen del teniente Ronald Ojeda fue imputado un adolescente venezolano presuntamente encargado de la cobertura del secuestro y se busca como sospechosas a otras 2 personas de esa nacionalidad, Maickel Villegas y Walter Rodríguez, quienes integrarían la banda internacional el Tren de Aragua.
• Este último trabajó para el régimen de Maduro, mostró su certificado de cotizaciones venezolano. El reporte detalló que en 2015 se desempeñó durante 7 semanas en el “GE despacho del gobernador”. Publicaciones de ese país de casos no relacionados con el secuestro mostraron que el código del empleador que figura en su informe corresponde a la gobernación de Aragua, que encabezó el abogado Tareck El Aissami, quien luego sería vicepresidente y está en prisión preventiva por un escándalo de corrupción, dijo el gobierno venezolano.
• El fiscal Héctor Barros dijo en abril que la hipótesis de la fiscalía es que el secuestro y homicidio del teniente Ojeda fue encargado desde Venezuela, por razones políticas, y presuntamente ejecutado por el Tren de Aragua.

Qué se sabe de Yolvi González. Nació en Venezuela el 8 de enero de 2003. Su certificado de cotizaciones de ese país no registra que haya tenido empleos formales. A las policías chilenas dijo tener estudios de enseñanza media y ser barbero.

• Entró a Chile irregularmente y, antes del crimen del teniente Emmanuel Sánchez, registraba una causa como víctima de robo con violencia, de 2023.
• En su iPhone 13 pro celeste, incautado por la policía, se encontraron fotos suyas posando con pistolas, se indaga si reales o de utilería.
• Tras su detención y posterior formalización de cargos por el tiroteo en Quinta Normal en que murió el teniente Sánchez, tras seguir a un motochorro, llamó la atención de las policías por mirar de frente a las cámaras, con una semisonrisa.
• A diferencia de los otros detenidos por el caso, sí declaró en la causa.
• “Ni la muerte nos detiene y, si la muerte nos sorprende, bienvenida sea”, decía uno de los mensajes publicados en redes sociales antes de su detención.
• La fiscalía indaga si pertenecía al Tren de Aragua, arista abierta por las características del crimen y por testimonios contenidos en la carpeta de investigación.
• El ciudadano venezolano Julio González Vargas, el fallecido conductor del vehículo desde donde dispararon al teniente Sánchez, había sido reclutado bajo extorsión por el Tren de Aragua, declaró una testigo.
• “Me dijo que había tenido problemas con unos muchachos que eran del Tren de Aragua”, declaró la mujer. “Le dijeron que, si no trabajaba para ellos, le iban a matar a su familia”.

Su declaración. “Llegue a la República de Chile hace aproximadamente (la fecha no aparece en la transcripción), ingresando por un paso no habilitado de la comuna de Tacna, con la finalidad de llegar a la Región Metropolitana, en donde se encontraba mi madre (…), la cual vive en la comuna de Pudahuel”, al poniente de Santiago, consignó su declaración, tomada por la policía, a las 5 am del 11 de abril.

• “El día de ayer, durante el transcurso de la tarde noche, mientras me encontraba en mi domicilio en la comuna de Pudahuel, recibo una llamada de un tipo que lo apodan como ‘El Gigante’, con la finalidad de salir a jalar teléfonos a la calle, entregándome una ubicación en una comuna que no recuerdo, donde le pido a un amigo de nombre Daniel que me haga la carrera al lugar, momento (en) que al llegar me junto con ‘El Gigante’, junto con cinco personas más”, declaró González.
• “Nos subimos a un vehículo marca Chevrolet, marca Onix, color blanco. Yo me subí en los asientos traseros del vehículo atrás del conductor”.
• “Los dos sujetos que se encuentran conmigo en la comisaria también se subieron al vehículo antes señalado. Luego de lo anterior, salimos a jalar teléfonos nosotros en un auto y nos acompañaba un sujeto en motocicleta, el cual se dedicaba a jalar teléfonos y nosotros lo cubríamos”.
• “Mientras nos encontrábamos en eso, nos detuvimos en un lugar junto con la motocicleta y en esos instantes llega otro auto, de donde se bajó el conductor con una pistola en su mano y nos apuntó”, dijo en referencia al teniente Sánchez.
• “Al ver esta situación, yo salgo del auto y empiezo a correr por distintas calles, a lo cual llamo desde mi teléfono celular a un sujeto apodado como ‘Andresito’, el cual se encontraba manejando un Honda, modelo Accord, el que también se encontraba con nosotros jalando teléfonos”.
• “Después de esto me subo a ese vehículo y vi que los mismos sujetos que nos encontrábamos en el automóvil marca Chevrolet, modelo Onix, se encontraban en el vehículo Honda, modelo Accord”.
• “Luego de estos nos fuimos a la comuna de Rancagua, a cambiarme de ropa, que me pasaron a uno de los sujetos que se encontraban en el auto, y fuimos a buscar a la pareja de uno de los tipos”.
• “Luego de esto, la ropa que estaba utilizando la tiré junto a unos indigentes en el lugar. Después de eso nos regresamos a Santiago, y mientras íbamos por la carretera, la policía nos paró con los carros policiales, bajándonos a todos del auto y trasladándonos a una comisaría”.

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