Miguel Ángel Apablaza Suárez (24 años) llamó desde la cárcel de Puente Alto al Ministerio de Desarrollo Social solicitando que dejaran entrar a un grupo de personas para retirar computadores y documentación. La operación tuvo éxito dado que también se vulneraron los protocolos de seguridad de la institución encabezada por Giorgio Jackson.
“El Miguelito”, como le dicen, es nieto de Elena Rojas Crespo de 60 años detenida ayer en Renca con los 23 computadores que fueron robados desde el ministerio el miércoles en la noche.
Carabineros ha explicado hasta ahora que explicado el robo ocurrió cerca de la medianoche del miércoles, y se dividió en 2 partes.
La primera fue el llamado realizado por “El Miguelito” al guardia, identificándose como Giorgio Jackson. El reo pidió entregar 50 computadores a un supuesto sobrino del ministro que pasaría a buscarlos. El guardia junto con personal que se encontraba a esa hora en la cartera reunieron 23 computadores, que entregaron al hombre que llegó a retirarlo, violando los protocolos establecidos para estos casos.
El coronel Velasco dijo que las primeras diligencias —que incluyeron la revisión de las grabaciones de las cámaras dentro y fuera de la cartera— permitieron establecer “la participación de un móvil de una aplicación, lo que en definitiva nos llevó a un lugar en la zona norte de la capital”.
Detienen a segundo implicado en robo de computadores del Ministerio de Desarrollo Social
El conductor llegó a un domicilio en la comuna de Renca, donde entregó los computadores a una mujer chilena con antecedentes por robo e infracción a la ley de drogas.
Efectivos del OS-9 llegaron al barrio y la encontraron. La detuvieron cerca de las 2pm en la vía pública, con los computadores en su poder, por el delito de receptación.
La segunda parte del robo (que duró cerca de media hora) ocurrió tras un segundo llamado de “El Miguelito”, avisando que irían 3 personas a fumigar el quinto piso y se llevarían una caja de seguridad.
Los hombres llegaron en un segundo vehículo con overoles y máscaras faciales. El guardia los dejó entrar.
El coronel dijo que se investiga “dónde estaría esa caja fuerte, un segundo vehículo que se encuentra involucrado y también los responsables”.
La caja contenía garantías de licitaciones y tratos directos con organizaciones.