Estudio sobre Inglés: 7 de cada 10 alumnos de 3° medio no logran conocimiento de 8° básico
La Agencia de Calidad de la Educación dio a conocer las conclusiones del Estudio Nacional de Inglés, que se realiza de manera muestral a estudiantes de 3° medio, donde se obtuvieron bajos resultados y se confirmaron las brechas de acceso, según nivel socioeconómico.
En una escala de 0 a 100, que mide la prueba de inglés, el puntaje promedio fue de 51 puntos, mientras que el porcentaje de estudiantes que alcanzó el nivel básico e intermedio fue de un 32%.
Lo anterior significa que solo 3 de 10 alumnos logra cumplir con los aprendizajes básicos esperados para 8° básico. O, al revés, 7 de cada 10 no logran lo que se esperaría de un estudiante del anterior ciclo.
Además, los resultados muestran que mientras que el 85% de los estudiantes de nivel socioeconómico alto alcanza los niveles básico e intermedio, solo un 9% de los alumnos de bajos ingresos lo logra. En tanto, los resultados por género muestran que un 30% de las mujeres y un 33% de los hombres alcanzan los niveles básico e intermedio.
En términos geográficos, no se observan variaciones significativas entre el puntaje nacional y los resultados de cada región. Sin embargo, el porcentaje de estudiantes que alcanza el nivel básico e intermedio en la Región Metropolitana es significativamente mayor que en el resto del país, mientras que en las regiones de Tarapacá, Maule y Magallanes superan el promedio general.
La medición contempló 50 preguntas, organizada en 25 de comprensión lectora y 25 de comprensión auditiva, según los niveles del Marco Común Europeo presentes en los objetivos fundamentales y contenidos mínimos.
El sondeo -realizado en 2017- consideró a 137 establecimientos y un universo de 7.340 alumnos, los cuales fueron seleccionados a través de una muestra representativa a nivel nacional, regional y de género.
Los factores que influyen en las brechas
La Agencia de Calidad señala que la diferencia en los resultados se ve afectada por diversos factores, entre ellos la cantidad de horas pedagógicas que se dedican a la enseñanza del inglés, la preparación de los docentes y la realización de las clases en el idioma.
Al respecto, casi un tercio de los estudiantes declaró tener más de tres horas a la semana de esta asignatura. Este dato es clave, considerando que este mismo grupo obtiene en promedio 60 puntos, es decir, 11 puntos más que el promedio de los estudiantes con tres o menos horas a la semana (49 puntos).
En el caso de los estudiantes cuyos profesores realizan sus clases hablando inglés obtienen, en promedio, 11 puntos más en la prueba que los estudiantes cuyos profesores hablan toda la clase en español (59 puntos vs 48 puntos). Este último grupo es casi un tercio de los estudiantes evaluados.
Por otra parte, cerca del 40% de los docentes cuenta con certificación A2 (nivel básico); esto muestra una brecha importante considerando que lo exigido para profesores en ejercicio es nivel B2 (intermedio) y para los profesores en formación, C1 (avanzado). A su vez, se observa que el grupo de estudiantes con profesores con mayor nivel de certificación obtiene mejores resultados.
Otro factor clave es la exposición al idioma. De hecho, quienes muestran mayor contacto con esta lengua obtienen hasta 23 puntos más en la prueba (63 puntos vs 40 puntos).
Al respecto, algunos datos resultan clave:
- El 24% de los estudiantes señala que ve películas en inglés casi todos los días
- El 22%, revisa páginas web
- El 8%, chatea en este idioma
¿Cómo enfrentar este panorama?
Como parte de las medidas, el Ministerio de Educación elaboró el Plan Nacional de Inglés “English in english”, el que se enmarca dentro de los compromisos del Gobierno por mejorar la calidad de la educación en todos sus niveles.
La ministra de Educación, Marcela Cubillos, señaló que “como Gobierno nos hemos propuesto avanzar en calidad para que nuestros niños y jóvenes tengan reales oportunidades de desarrollo en el futuro. El plan de inglés “English in english” es un paso más en el compromiso por la mejora de los aprendizajes desde la sala de clases”.
“Queremos que nuestros estudiantes cuenten con herramientas que les amplíen las oportunidades. El dominio del inglés abre puertas al crecimiento profesional, a la educación superior y al mundo laboral”, agregó.