Nuevo plan de seguridad de La Araucanía: subsecretario Ubilla da a conocer las medidas
El subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla, presentó este viernes en Temuco las medidas que contempla el nuevo plan de seguridad para La Araucanía y la Provincia de Arauco, a un mes exacto del operativo de Carabineros que terminó con el homicidio del comunero mapuche Camilo Catrillanca.
Tras reunirse con las autoridades de la región, encabezadas por el intendente Jorge Atton, el subsecretario dio a conocer algunos aspectos que contempla el plan. Entre ellos, confirmó el retiro del GOPE de comunidades mapuche en La Araucanía y el sur del Biobío.
El subsecretario indicó que de ninguna manera se dejará la zona sin protección, asegurando que esa confusión "se produce por la decisión del gobierno de retirar al GOPE, pero al retiro, son reemplazados por el mismo número de fuerzas especiales, fuerzas especiales que tienen como labor trabajar en labores preventivas".
Además agregó que se instalará en Temuco una unidad de derechos humanos, que trabajará las temáticas en conjunto con el Insituto Nacional de Derechos Humanos (INDH). "Esto se conjuga con su funcion prioritaria (de Carabineros) que es dar seguridad a la población con los estandares de derechos humanos, en Temuco vamos a tener una unidad a cargo de un mayor".
Ubilla también explicó que "otra área que es aplicable a las dos policías, es que hemos conversado con el fiscal regional para generar un programa permanente en la región con las policías para el levantamiento de evidencia en los sitios del suceso. Hay debilidades, tenemos que ser más efectivos en los procesos investigativos, la idea del gobierno en conjunto con los funcionarios policiales, en especial con Carabineros de Chile es trabajar en mejorar los procedimientos y dar mayor seguridad a la población".
Finalmente puntualizó que se adquirirán 140 cámaras para los procedimientos de Carabineros, en línea con lo que informó la propia institución uniformada. La idea es que estas cámaras no puedan ser manipuladas, para evitar así la destrucción de las tarjetas de memoria, como ocurrió en el caso Catrillanca.