"No sacamos nada con vacunar si la gente no se cuida y no mantiene las medidas de cuidado, porque la pandemia sigue en curso", enfatizó este jueves el director del ISP Heriberto García al abordar en Tele13 Radio el proceso de inmunización, que a la fecha ha permitido llegar a más de 50 mil personas, principalmente funcionarios de la primera línea de la salud.
Un proceso que desde este jueves iniciará su fase más masiva, luego que esta mañana se reciba el primer cargamento de la vacuna china Sinovac, la que -se estima- permitirá llegar a 5 millones de personas.
"Este es un proceso que todavía está en camino y que inicia con que tengamos ahora tres opciones de vacuna", destacó García en Mesa Central, luego que este miércoles el comité asesor del organismo autorizara el uso en Chile de la vacuna desarrollada por la Universidad de Oxford y AstraZeneca, la que se sumará a la del laboratorio chino antes mencionada y a la de Pfizer-BioNtech, con que comenzó el proceso a fines de diciembre.
García destacó la decisión del consejo asesor de aprobar el uso de la vacuna Sinovac en mayores de 60, señalando que esto permitirá "ir aumentando la cobertura en la población de mayor riesgo".
Con todo, remarcó que "para llegar al 80% falta mucho, la provisión de vacunas va a ser lenta, porque estamos todos los países preocupados de tener vacunas, por lo que es muy importante mantener las medidas de cuidado", entre ellas el uso permanente de mascarilla al estar en contacto con otras personas, mantener una distancia de al menos 1 metro y el lavado frecuente de manos.
¿Cómo funcionan las vacunas?
García explicó que las vacunas contra el COVID-19 funcionan de una manera homologable a la de la que anualmente utilizamos para prevenir la influenza, y donde "las personas igual pueden contraer la influenza, pero es tan leve que puede parecer un resfrío común".
"El problema del COVID-19 no es que las personas estén con un resfrío, sino que empeoren y que generen un estrés en el sistema de salud", explicó.
Junto con esto, García remarcó la importancia de vacunar progresivamente tanto a las personas que pertenecen a los grupos de riesgo como a quienes no, "porque en menores de 16 la enfermedad no genera un problema en ellos, pero son vectores de contagio".