Día de la mujer: por qué desde el feminismo piden conmemorar y no celebrar
¿El Día Internacional de la Mujer se celebra o se conmemora? Si bien para muchos la respuesta es clara y la discusión casi estéril, hay quienes continúan debatiendo -sobre todo en redes sociales- sobre cómo se debe actuar el 8 de marzo, si se deben organizar celebraciones o incluso si es bien visto regalar flores junto con chocolates a las mujeres.
Ya la semana pasada se abrió una batalla en Twitter donde algunos usuarios defendían el acto de entregar distintos regalos a las mujeres de su familia o lugares de trabajo, mientras que otros recalcaban que más que ser una fiesta, debe ser un día de reflexión sobre qué pasó, cuánto avanzamos y cuánto camino falta por recorrer.
Sin embargo, antes de iniciar cualquier debate se debe tener claro los orígenes de este día y lo importante que fue la lucha, año a año, de distintas y valientes mujeres a lo largo del mundo.
¿Cómo nació el Día Internacional de la Mujer?
Según la Organización de Naciones Unidas, el Día Internacional de la Mujer fue conmemorado desde 1975 y proclamado por la Asamblea en 1977, pero sus orígenes están marcados mucho antes en el calendario, en las manifestaciones de mujeres que, a comienzos del siglo XX, protestaban por su derecho a voto, condiciones de trabajo y la igualdad de género.
Se dice que el primer 8 de marzo vinculado a las reivindicaciones fue el de 1857, cuando miles de mujeres trabajadores textiles marcharon por Nueva York por mejoras laborales. Sin embargo, hay autoras como Liliane Kandel o François Picq que aseguran que esa versión se alimentó para ocultar un origen soviético de la conmemoración feminista.
Según explica la ONU, "en el marco de los movimientos en pro de la paz que surgieron en vísperas de la Primera Guerra Mundial, las mujeres rusas celebraron su primer Día Internacional de la Mujer el último domingo de febrero, organizando mítines clandestinos".
Entonces ¿conmemoramos o celebramos?
Para la ex ministra del Servicio Nacional de la Mujer y directora de la Dirección de Género de la Universidad de Chile, Carmen Andrade, la respuesta es contundente y clara.
En conversación con T13.cl, Andrade explica que "el Día de la Mujer en muchos lugares se ha transformado como en un día de fiesta en que se comen chocolates, empiezan a ir cantantes y bailan, mueven la colita y no sé qué, pero lo que no tenemos que olvidar es que este es un día que simbólicamente representa la lucha de las mujeres por lograr sus derechos, por lograr ser consideradas iguales, ser tratadas como iguales y que su origen tiene que ver con obreras textiles en Estados Unidos que resultaron quemadas".
"Aquí hubo mujeres muertas que marcaron un camino de lucha", recalcó. "Que esto se transforme como digo en un día como si fuera de la jarana y como si estuviéramos celebrando el cumpleaños de las mujeres, se banaliza, se pierde el fondo de lo que significa el Día Internacional de la Mujer", afirma.
Por otro lado, la vocera de la Coordinadora Feminista 8M, Karina Nohales, aseveró que "el 8 de marzo a nivel global se conmemora el coraje de las obreras que decidieron ir a la huelga para exigir sus derechos".
"Esta fecha, que las mujeres hemos hecho perdurar a lo ancho de todo el mundo por más de cien años, es un momento para plantear con voz propia lo que tenemos por decir. Hemos reclamado el derecho al voto, al aborto, la 'democracia en el país y en la casa' y hemos reivindicado nuestro derecho a vivir sin incertidumbre y sin miedo", apunta.
En ese sentido, Nohales agrega que "también hemos reivindicado el derecho a ser felices, al placer y al goce. Yo diría que podemos quererlo todo, los derechos y también las flores y los chocolates".