“Sirena de hielo” es la primera latinoamericana en cruzar a nado dos veces la isla Manhattan
La “Sirena de Hielo”, Bárbara Hernández, acaba de conquistar una nueva marca en su carrera este sábado 14 de agosto, al convertirse en la primera mujer latinoamericana en nadar dos vueltas alrededor de la Isla Manhattan. Fue el desafío más largo en distancia y tiempo para la nadadora, quien lo hizo sin detenerse, completando 94 kilómetros en 20 horas y 30 minutos.
Hasta ahora, solo lo habían logrado 10 personas en el mundo, la mitad de ellas mujeres. El reto comenzó el viernes 13 de agosto a las 11:10 horas de Chile (misma hora local) y finalizó aproximadamente a las 07:30 de la mañana del sábado 14 de agosto.
“Fue súper complejo, ya que es un nado muy estratégico donde no sirve ser rápida, tuve que salir mucho más lento para en la segunda vuelta no tomar la corriente en contra. Por lo mismo, estaba muerta de frío. Al terminar la primera vuelta, por la corriente tuve que esperar y fue cuando más sentí la hipotermia, ya que no puedo salir del agua, ni tocar la embarcación y nadie me puede tocar, o quedaba descalificada”, explicó la embajadora Garmin.
Una de las partes más complicadas de la trayectoria se debía a la contaminación de las aguas, mezclada con líquidos y combustibles de las embarcaciones que pasaban muy cerca de la deportista. Algunas de ellas con turistas muy curiosos y sorprendidos mirando la performance de Bárbara.
Durante la segunda vuelta a la isla, la “sirena” pudo aumentar la velocidad, sin embargo, le tocó la corriente en contra, donde le tocó cruzar cuatro de los puentes con este fenómeno. Adicionalmente, chocó con varias piedras, ramas, objetos extraños y peces en el camino, “esta parte del nado la logré a puro corazón y gracias a mi equipo que se preocupó de alimentarme con hidratantes, tirándome mi alimento al agua para ayudarme a combatir la hipotermia”, explica.
A este difícil desafío se sumó otra complejidad. Cuando la nadadora Garmin tuvo la corriente a favor, el viento iba en contra, por lo que tuvo que nadar con un gran oleaje que enlenteció mucho más su nado. Finalmente, después de una titánica hazaña, la psicóloga completó el nado más extenso de su carrera con las celebraciones de su equipo que la acompañaba y la alegría de haber conquistado una nueva marca para Chile.