El ministro del Interior, Rodrigo Delgado, aseguró, este lunes, que la familia que volvió a Chile desde Estados Unidos y en que un bebé de 7 meses resultó contagiado con la variante Delta de COVID-19, podían abandonar el país por motivos de trabajo. El jefe de gabinete, sin embargo, cuestionó que la familia no cumplió con los protocolos en su regreso.
“Las fronteras están con un tratamiento específico. No están cerradas del todo. Hay formas de entrar y salir con regulaciones específicas. Hay causales específicas para poder otorgar un permiso a un ciudadano chileno que quiera ir al exterior; una es la humanitaria, la otras es para el desarrollo del país, y ahí hay permisos dependiendo del rubro de la persona que tenga que salir por trabajo, y también por salud”, detalló Delgado.
Caso de variante Delta en bebé de San Felipe: padres de menor "no cumplieron con cuarentena"
Al ser emplazado el ministro sobre por qué se autorizó al hombre quien fue invitado a dar una conferencia a Estados Unidos, junto a su esposa, el titular de interior explicó que era una tarea relevante.
“En este caso específico fue una invitación a ambos, a la persona que iba a hacer la conferencia y a su esposa, así lo dice la invitación, y por lo tanto no podían dejar al bebé en Chile. Esa fue la explicación. Él tenía que dar una conferencia presencial, era una invitación que está ligada a una instancia de la Casa Blanca, y tal como se le exige a cualquier persona que salga de Chile, tiene que cumplir protocolos de salida, como de entrada”, siguió Delgado.
“Cabe dentro de una de las causales. Así como hay gente que sale por estudios, también alguien puede salir a dictar una conferencia que, en ese marco y en ese contexto, es relevante también para esa invitación. (…) Más que la invitación, yo pondría el acento en que las personas que vuelven a Chile, tienen que cumplir los protocolos sanitarios”, añadió.
Tal como explicó durante la mañana de este lunes la subsecretaria de Salud Pública, Paula Daza, Delgado contó que la familia no habría cumplido la cuarentena que debía hacer en su domicilio y no en una residencia sanitaria, por tener a un bebé menor de dos años, por lo que se inició un sumario sanitario contra ellos.
El bebé de siete meses fue quien presentó síntomas de COVID-19, por lo que se le realizó un PCR que resultó positivo. Tras esto la familia se trasladó a una residencia sanitaria y se realizó una secuenciación, la que arrojó que el menor portaba la variante Delta, conocida por su mayor transmisibilidad.