En medio de la tramitación de la ley que despenaliza el aborto bajo tres causales (inviabilidad fetal, riesgo de la vida de la madre y violación) y ahora está tramitándose en particular en el Senado, el rector de la Universidad Católica, Ignacio Sánchez, aclaró que ninguno de los médicos que dependan de la casa de estudios realizará un aborto.
"En esta institución no vamos a realizar abortos, eso es definitivo y es final, no vamos a realizar abortos", sostuvo el rector, agregando que "no es posible que el Estado obligue a las instituciones a contratar personas que hagan abortos, eso no lo vamos a hacer".
Sánchez afirmó que en el caso que una paciente le solicite realizaste un aborto, "lo que vamos a hacer es derivar de manera segura a la paciente a otro centro de salud".
"No hay personas disponibles aquí, y si no hay personas disponibles, se trasladarán a otro lugar", recalcó Ignacio Sánchez, quien además solicitó que la posibilidad de traslado quede establecida en la ley.
El rector hizo énfasis que la derivación no pondría en riesgo la salud del paciente, pues esta sólo se realizaría de encontrarse estable "lo que estoy hablando es cuando, voluntariamente y en forma electiva, alguien nos solicita esa prestación, lo vamos a derivar a la Posta Central, que está a tres minutos, o a otro hospital que está cerca", agregó.
El doctor de la Universidad Católica además se refirió a la "objeción de conciencia" la cual hasta el momento solo aplicaría para el cirujano tratante.
"Es completamente discriminatorio no valorar la objeción de consciencia para el equipo de salud. ¡Cuál es la razón para que un anestesiólogo, para que una enfermera o una arsenalera no tenga derecho a tener objeción de consciencia?", se preguntó haciendo un llamado al Gobierno a ampliar la medida a todo el equipo de salud.
En rector de la Universidad Católica finalizó diciendo que "si en algún momento, en el futuro, a algún Parlamento se le ocurre analizar el tema de la eutanasia, tampoco vamos a estar".