Actualmente, solo los taxis pueden realizar la conversión de bencina o diésel a gas. No obstante, el gobierno efectuará una modificación al reglamento para que todos los vehículo puedan optar a este cambio, lo que esperan esté listo a finales de este año.
"El gas tiene una ventaja que es que es menos contaminante que la bencina o el diésel y que además genera ahorros para el bolsillo de los usuarios. Entonces tiene eso dos objetivos: menos contaminación y más ahorro", aseveró el ministro de Energía, Juan Carlos Jobet, en T13.
Para realizar este cambio, los vehículos deben tener un máximo de cinco años de antigüedad e invertir aproximadamente $1.000.000.
"Esto debería tener un costo desde $800.000 y $1.000.000 por conversión. Hay distintos talleres donde se puede hacer esto y esperamos que ahora que se amplía el permiso, se masifique el acceso a esta conversión", precisó Jobet.
Si bien este cambio requiere de una inversión inicial por parte de los dueños de los automóviles, el jefe de la cartera de Energía aseguró que el ahorro que se genera es mayor.
"Hay un ahorro más menos un 35% en el gasto mensual comparado con lo que es bencina y diésel. Entonces, esto conviene sobre todo a la gente que anda más kilometrajes en el año", señaló la autoridad.