Este sábado, el Ministerio de Transportes anunció un plan de contingencia para viajes en buses interurbanos y terminales, además de un refuerzo en el transporte público a partir del lunes, cuando Santiago y Estación Central salgan de cuarentena y entren a fase de transición.
En esa línea, la ministra de Transportes, Gloria Hutt, anunció que a partir de este lunes, 115 nuevos buses eléctricos se sumarán al eje Alameda, esto con la finalidad de evitar aglomeraciones y así, posibles contagios de coronavirus.
Hutt señaló a T13 Tarde que en los buses habrá una demarcación de la distancia física entre pasajeros, además de señalar que se realiza sanitización de los buses del sistema Red (Ex Transantiago) entre una a dos veces al día.
Además, la secretaria de Estado señaló que hay mil paraderos en los cuales se hará sanitización, además de añadir instrucciones para los pasajeros y la inclusión de monitores para orientar y controlar a las personas.
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Terminales y viajes en buses interurbanos:
Ante el desconfinamiento a partir del lunes en Estación Central y Santiago, el nuevo protocolo para viajes interurbanos contempla una serie de exigencias sanitarias. Se seguirán manteniendo la exigencia de un pasaporte sanitario y el salvoconducto o permiso temporal respectivo, sin embargo, ahora se exigirá para terminales y buses, facilitar el acceso a las máquinas para evitar aglomeraciones.
Desde el MTT recordaron que si una persona debe viajar, no debe estar dentro de los casos de contagio de COVID-19 o estar en cumplimiento de una cuarentena, además que en todo momento debe usarse mascarillas y lavado de manos frecuente y/o uso de alcohol gel.
Los terminales deberán demarcar la distancia de un metro en los sectores de andenes, las oficinas de ventas de pasajes, etc. además de instalar separadores y entregar información sobre medidas de prevención del COVID-19.
También, las empresas de buses deberán incentivar la venta electrónica de pasajes y realizar de manera permantente la limpieza y desinfección de buses, además de eliminación de comida a bordo y entregar índices de ocupación de los buses por destinos, días y horas, con tal que los pasajeros puedan privilegiar los viajes con menos porcentaje de ocupación en los buses.