El ex director de obras de Machalí, Jorge Silva Menares fue condenado a 818 días de presidio por el Tribunal de Rancagua luego de un procedimiento abreviado este sábado. Esto dada su calidad de autor por el delito reiterado de cohecho en el marco del Caso Caval, ilícitos que se habrían cometido entre los años 2013 y 2014 en Machalí.
Además, Silva fue condenado a una pena de tres años y un día de inhabilitación absoluta para postular a cargos públicos, sin embargo, esta sentencia fue sustituida por el pago de una multa de $55.030.792 (1170 UTM).
El magistrado Mauricio Silva también condenó al ex director de obras a la pena de prestación de servicio comunitario, que se distribuirá en ocho horas por cada tercio de unidad tributaria mensual. Con esto, Silva quedará sujeto a control administrativo y a la asistencia del Centro de Reinserción Social de Gendarmería.
La sentencia señala que “los hechos descritos configuran el delito de cohecho del artículo 248 bis del Código Penal, en carácter de reiterado, toda vez que un empleado público, funcionario de la I. Municipalidad de Machalí, Director de Obras, recibió, directamente o a través de su cónyuge, dineros para realizar gestiones propias de su cargo con infracción a los deberes de su cargo”.
Según explicó el magistrado, los delitos ocurrían cada vez que se producía una “modificación del plan regulador intercomunal Rancagua- Machalí, con el objeto de aumentar el límite urbano incorporando dentro de él los predios denominados Santa Cecilia, San Diego y Santa Elena”.
