Camioneros privados bolivianos bloquean este miércoles rutas hacia Chile y Perú, en protesta por el reinicio después de casi 16 años del servicio férreo de carga con el puerto chileno de Arica, según informó la policía en La Paz.
Los conductores aseguran que el comercio podría preferir el uso de la vía férrea y esto podría causarles daños económicos.
El subjefe de la Policía regional, coronel Humberto Romero, afirmó que "el reporte último es que hay tres puntos [de cortes de ruta] identificados: el de Vilaque, el de Huarina y el de Laja".
Esos tres poblados están en el departamento de La Paz y conectan con rutas hacia el norte chileno y hacia el binacional Lago Titicaca que comparten Bolivia y Perú.
Si es que surgieran desmanes de los piqueteros, Romero adelantó que "la Policía garantizará el orden público en todo el departamento".
La línea férrea, de un total de 440 kilómetros, con el puerto chileno de Arica estuvo interrumpida desde 2005, por daños en el lado boliviano y fue restablecida en los últimos meses.
El gobierno del presidente Luis Arce invitó a los conductores a un diálogo.
El canal privado Unitel mostró imágenes de camioneros cortando rutas en el departamento de La Paz y con los reclamos de los conductores que se oponen al reinicio de un tren de carga binacional alegando que les causará daños económicos.
La privada boliviana Ferroviaria Andina SA (FASA) hizo una prueba piloto la semana pasada con el transporte de unas 460 toneladas de carga en vagones férreos de Chile a Bolivia y de retorno de unas 400 toneladas de soja.
Tras la prueba piloto, la empresa tiene planes para establecer un servicio continuo, en una línea que tiene un total de 440 kilómetros.
El línea férrea forma parte de las compensaciones que hizo Chile a Bolivia, tras la denominada Guerra del Pacífico a fines del siglo XIX, cuando los bolivianos perdieron 400 km de costa y 120.000 km2.
Bolivia y Chile carecen de relaciones diplomáticas desde 1978.
La Paz, además, perdió en 2018 un juicio contra Santiago ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya, donde demandó una salida al mar.
