El Presidente Gabriel Boric sumó su firma al Acuerdo sobre la Conservación y Uso Sostenible de la Biodiversidad Marina más allá de las Jurisdicciones Nacionales, propuesto por la Organización de las Naciones Unidad (ONU).
El objetivo de esta iniciativa es proteger el 30% de los océanos, al año 2030 como meta.
Hace unos días, Greenpeace publicó el reporte “30x30: Del Tratado Global de los Océanos a la protección en altamar”, donde se fija una hoja de ruta para alcanzar dicha meta o propósito.
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“Entre 2018 y 2022, la extracción en alta mar aumentó un 8,5% a casi 8,5 millones de horas, y en las áreas identificadas para la protección bajo el 30x30, la cifra aumentó un 22,5%. Estas tendencias muestran que la realidad en el mar va en dirección opuesta a la ambición establecida en el Tratado. Lo que pone de manifiesto la urgencia de la acción política para cumplir la meta del 30x30 mediante el Tratado de los Océanos”, explica Estefanía González, vocera de Greenpeace.
Por su parte, durante su intervención en la Asamblea de la ONU, el Presidente Gabriel Boric señaló que un sector minoritario de la sociedad, pero muy poderoso, no se somete a estos debates ni a las reglas democráticas.
“Por mucho que acá declaremos nuestras buenas intenciones, si no somos capaces de someter a estos grupos a la voluntad de la comunidad internacional expresada por los liderazgos aquí presentes, no vamos a llegar a la meta”, cuestionó el mandatario.
Cabe señalar que, junto a Chile, firmaron 67 países más la Unión Europea, destacando Estados Unidos, Australia, Reino Unido, España, Francia, China, Costa Rica, México y Noruega, entre otros.
“Es una muy buena noticia que Chile haya cumplido su compromiso y haya escuchado a las miles de personas que hoy apoyan la protección de los océanos a través de la firma del Tratado”, concluyó la vocera Greenpeace.
