Bono clase media y préstamo solidario avanzan con cambios en el Senado
La comisión de Hacienda del Senado aprobó ayer con diversos cambios y despachó a la Sala el proyecto de ley que entrega un bono de $ 500 mil para la clase media y que, además, establece la posibilidad de acceder a un crédito que pasó de hasta $ 1.950.000 a hasta $ 2.600.000.
La sesión se prolongó durante gran parte de la jornada debido a que a primera hora senadores de oposición y el Gobierno advirtieron que el texto presentado por el Ejecutivo establecía que ambas iniciaticas estaban unidas y que quienes luego de acceder a uno quisieran hacerlo al préstamo debían abonar los $ 500 mil en alguna de las cuatro cuotas establecidas.
Lo anterior fue calificado como “letra chica” por el senador de la Democracia Cristiana, Jorge Pizarro, quien solicitó junto a sus pares de Chile Vamos, José García (RN) y Juan Antonio Coloma (UDI), separar los referidos beneficios para no generar una eventual confusión en la entrega de las ayudas.
El Gobierno, luego de un extenso debate, accedió a lo solicitado.
El senador del Partido Socialista, Carlos Montes, explicó que “lo que logramos mejorar por unanimidad es que el bono de $ 500 mil no se descontará de la primera cuota del préstamo y ambos beneficios son por separado y si alguien prefiere optar a una sola ayuda es opción de cada persona”.
Explicó que “no se trata de tres cuotas de $ 650 mil cada una como se presentó públicamente. La realidad es que una persona que obtuvo el bono y quiere el préstamos en su primera cuota recibirá $ 150 mil”.
Tanto Ejecutivo como parlamentarios coincidieron en que el bono más el préstamo puede ser por un máximo que va desde $ 2.100.000 (más el bono) o de $ 2.600.000 si no opta a tales recursos.
Se concreta indicación
El ministerio de Hacienda formalizó, además, la indicación que amplió el rango para los beneficiarios del bono clase media elevando el costo fiscal hasta US$ 190 millones, al agregar a unas 142.853 personas al rebajar el requisito para acceder a la ayuda desde los $ 500 mil a los $ 400 mil como ingreso mensual formal.
Para acceder a los beneficios se debe demostrar que se ha reducido en un 30% los ingresos debido a la pandemia y el préstamo cubrirá hasta el 70% de la pérdida de las referidas entradas.
El crédito tendrá un año de gracia, tres años de pago con un máximo de 5% del ingreso; y si al término de estos cuatro años una familia no ha podido cancelar íntegramente, la concesión de dineros será condonado por parte del Estado.
El bono de $ 500 mil será para todos los trabajadores que tenían ingresos formales de entre $ 400 mil y $ 1,5 millones mensuales, y que han sufrido caídas desde un 30% de sus ingresos.
Este aporte se pagará diez días después de promulgada la Ley e incluirá a trabajadores ocupados, suspendidos, cesantes, a honorarios y por cuenta propia, que hayan sufrido una caída de 30% o más en sus ingresos formales.
Este mecanismo también favorecerá, con montos decrecientes, a aquellos trabajadores con ingresos entre $ 1,5 millones y $ 2 millones, que hayan tenido disminuciones de entradas de 30%.
El proyecto tiene discusión inmediata, por lo que es posible que durante la jornada de este jueves sea analizado por la sala del Senado.
Perfeccionamiento del IFE
En paralelo, la Cámara de Diputados avanzaba en el perfeccionamiento del llamado Ingreso Familiar de Emergencia (IFE), previsto para proveer ingresos a grupos vulnerables.