Luego de dos años y medio de debate, este lunes fue un día histórico para Chile ya que finalmente el Tribunal Constitucional dio luz verde a la ley que despenaliza el aborto en tres circunstancias.
Con esta decisión, el alto tribunal rechazó los dos recursos presentados por parlamentarios opositores con el objetivo de frenar la iniciativa.
Y quedará en manos de la presidenta, Michelle Bachelet, promulgar la norma que legaliza el aborto en caso de riesgo de vida de la madre, inviabilidad fetal o violación que ya había sido aprobada por el Parlamento.
Te presentamos a las mujeres que lo hicieron posible.
1. La presidenta: Michelle Bachelet
Antes de Michelle Bachelet, ningún presidente chileno propuso despenalizar el aborto, que el general Augusto Pinochet criminalizó en 1989, poco antes de dejar el poder. Incluso la propia mandataria evitó presentar una ley en este sentido durante su primer gobierno, entre los años 2006 y 2010.
Al plantear la iniciativa, el 31 de enero del 2015, la exdirectora de ONU Mujeres abrió un frente de conflicto con la oposición política, y dentro de su propia coalición.
Proponer una ley del aborto implicaba enfrentar, entre otros grupos, a los sectores más conservadores de la Democracia Cristiana, uno de los partidos más importantes de su coalición, la misma que llevó al poder a los mandatarios Patricio Aylwin (1990-1994), Eduardo Frei (1994-2000) y Ricardo Lagos (2000-2006).
La presidenta decidió apostar su capital político a la iniciativa, pese a que cuando firmó el proyecto, ya enfrentaba el intenso debate en torno a sus reformas tributaria y de educación.
"Bachelet tuvo la valentía de llevar adelante su compromiso de gobierno en uno de los pocos países donde el aborto está penalizado y en una sociedad que desde la dictadura hasta ahora, ha tenido muchas dificultades para hablar de temas vinculados a los derechos sexuales", le dice a BBC Mundo Mané Salamanca, jefa de la oficina Chile de ONU Mujeres.
2. La ministra: Claudia Pascual
En septiembre de 2016, cuando el proyecto llevaba más de un año en discusión, la comisión de salud del Senado debía tomar una decisión crítica: seguir o no adelante con la tramitación.
La iniciativa se salvó por tres votos contra dos, incluyendo la decisión a favor de la demócrata cristiana Carolina Goic, hoy candidata presidencial.
En ese momento, Claudia Pascual, primera ministra de la Mujer y Equidad de Género en Chile, apenas pudo contener las lágrimas.
Con voz quebrada, habló a los parlamentarios: "Son las niñas, las mujeres y las adolescentes de este país las que necesitan una respuesta del Estado... uno que las contenga y las respete en sus propias convicciones, en sus propios pensamientos... les agradecemos como Ejecutivo la posibilidad de seguir tramitando este proyecto".
Pascual, primera militante comunista que llega a un gabinete de gobierno en Chile en 41 años, fue vocera permanente en un tema que genera intensas reacciones.
Pese a que un 60% de la ciudadanía apoya la despenalización en las tres causales que invocó el gobierno, es tanta la crispación que genera el tema en Chile que la primera ministra de salud de Bachelet, Helia Molina, debió renunciar a su cargo horas después de afirmar en una entrevista que en clínicas privadas, "familias conservadoras han hecho abortar a sus hijas".
3. La activista: Claudia Dides
"Estoy contenta de haber dedicado ocho años a esta causa, de ser parte de este proceso de libertad, de autonomía. Tengo la impresión de que sentimos lo mismo que sintieron las mujeres que consiguieron el derecho a voto", le dice a BBC Mundo la socióloga Claudia Dides, directora ejecutiva de "Miles".
La organización de Dides es financiada, entre otras instituciones, por la fundación de la escritora Isabel Allende.
"Nuestra estrategia más importante ha sido trabajar con gremios, sindicatos, trabajadores de salud, unificando grupos con distintas posiciones, capacitando profesionales, dando argumentos sólidos para el debate", agrega.
"Miles" es parte de una historia de activismo que nace en los grupos de mujeres formados en la dictadura, cuyas demandas fueron desplazadas durante la transición democrática.
Hoy, tras casi tres años de discusión sobre el aborto en el Congreso, organizaciones, abogadas, expertas, ginecólogas y matronas, igual que mujeres que quieren dar testimonio de su experiencia, han encontrado un espacio donde hacerse oír, ya sea ante las comisiones parlamentarias, en redes sociales o medios de comunicación, terminando con el tabú que rondó el tema por décadas.
4. Parlamentarias oposición: Lily Pérez y Karla Rubilar
Dos votos de la oposición política a Bachelet fueron decisivos para tramitar la despenalización del aborto. Los dos vinieron de mujeres.
"No soy dueña de la verdad, no puedo decidir por otros", comenzó diciendo la doctora y diputada Karla Rubilar en el congreso en marzo del 2016.
En un encendido discurso, la parlamentaria de centro derecha citó a Valerie Giscard, el presidente francés que despenalizó el aborto en 1975.
"Como católico, estoy contra el aborto, como presidente de los franceses, considero necesaria su despenalización. Como diputada de todos los chilenos, yo voto a favor de las tres causales", concluyó. Una ovación de los partidarios del proyecto se escuchó en la sala.
En julio del 2017, la senadora Lily Pérez debía manifestar su voto. Mientras hablaba, escuchó que un manifestante antiaborto le pedía que se callara.
La parlamentaria miró hacia las tribunas y respondió: "¡Y no me callo! No me voy a callar porque soy mujer y quiero defender lo que las mujeres sentimos". En una álgida sesión parlamentaria, la senadora fue el voto que permitió aprobar todas las causales, incluyendo la de violación.
"Muchas mujeres violadas van a seguir adelante con su embarazo, y las admiro. Pero no tengo por qué exigirle lo mismo a todas las mujeres si algunas no quieren hacerlo y han sido violadas, y por eso razón voy a aprobar también esta causal. He dicho", sostuvo.