Durante el 2016 cuatro de las seis vacunas que contiene el Programa Nacional de Inmunizaciones (PNI), obligatorio y gratuito, tuvieron una cobertura menor o igual al 85%. Así lo informó el diario La Tercera, quién indicó que la disminución corresponde a los periodos entre 2015 y 2014 cuando alcanzaron porcentaje superiores.
Las cifras que fueron obtenidas mediante la Ley de Transparencia afirmaron que la vacuna que se administra a los recién nacidos contra la tuberculosis (BCG) tuvo un total general de cobertura de 85,5%, en comparación al 98,3% que logró en 2014. La tercera dosis de la pentavalente, para menores de 18 meses y que se aplica contra la hepatitis B, tétanos, difteria, tos convulsiva y enfermedades producidas por la bacteria haemophilus influenzae tipo b, tuvo cobertura de sólo 82,3% en comparación al 94,9% de 2014. Mientras, en regiones como Los Ríos y Atacama están los promedios más bajos del país.
Según el medio, uno de los factores que, dicen los expertos, inciden en la disminución de las coberturas es el naciente movimiento que se opone a la obligatoriedad y que sostiene que no debería existir intervención estatal.
La publicación afirma que en 2016, la desconfianza hacia los efectos adversos generó que padres se opusieran a la vacuna contra el virus del papiloma humano (VPH), desencadenando una judicialización contra la obligatoriedad del proceso.