¡Paró una sierra eléctrica! celular en el bolsillo salvó a albañil de corte en su pierna
Pedro Emanuel González Vásquez, albañil de 31 años de Puerto Montt, trabaja regularmente en faenas relacionadas al sector salmonero, su rol es el de realizar diferentes “pegas” de albañilería y carpintería.
Justamente en eso estaba el lunes 16 de diciembre, trabajando junto a su socio en la construcción de estructuras metálicas para armar oficinas al interior de un galpón ubicado en una obra en la Ruta 5 Sur, en Lago Llanquihue, cuando mientras operaba una sierra circular de 1.800 watts perdió el control de la herramienta.
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“En cosa de segundos la máquina pasó de una mano a la otra y como se había desactivado el seguro de la sierra se me fue directo a la pierna derecha”, relata Pedro González, quien explica que al no tener la protección, la máquina le rajó el pantalón a la altura de su bolsillo.
“Lo primero que pensé fue que me iba a hacer un corte muy profundo, porque es una máquina con la que suelo cortar maderas de todo tipo y recién le había puesto una hoja de corte nueva. Al momento del accidente, estaba cortando retazos de un palo de 2x8 metros, que esta sierra circular corta con mucha facilidad”, relata.
Sin embargo, gracias a que en ese bolsillo tenía su celular HONOR Magic6 Lite, milagrosamente no sufrió ni un rasguño en la pierna.
“El pantalón que ahora uso como mi regalón quedó entero rajado, mientras que el celular también se rompió, pero se trata de un equipo ultra resistente, que de no haberlo tenido ahí, la sierra hubiera pasado cortando la pierna de forma bien profunda”, rememora Pedro quien justamente había comprado este teléfono buscando resistencia.
“Suelo trabajar con herramientas pesadas en espacios confinados, donde siempre hay mucha suciedad, químicos, y un celular como este era ideal para las caídas frecuentes y los golpes”, complementó.
“El teléfono ahora no funciona, pero me salvó la pierna, le tengo tanto cariño que de hecho tengo pensado enmarcar el celular como una forma de recordar un accidente que gracias a la resistencia del equipo sólo se transformó en una anécdota”, cierra este albañil puertomontino.