El Departamento de Evaluación, Medición y Registro Educacional (Demre) de la Universidad de Chile propuso hace al menos dos años un nuevo método de sistema de admisión para las universidades chilenas, que ponía fin a la Prueba de Selección Universitaria (PSU), y que fue presentada en un seminario al que asistieron autoridades del Ministerio de Educación y una exposición ante la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados.
La propuesta que fue estudiada por expertos y aplicada, a modo de prueba, a más de nueve mil estudiantes de cuatro regiones, según dicen desde el Demre, consistía en tres pruebas de selección: Competencia Lectora, Competencia Matemática y Competencia Científica. Además de dos pruebas de caracterización de las Competencias de Escritura y un Cuestionario de Habilidades Transversales.
Además, a diferencia de la PSU, estas pruebas distinguían las modalidades educativas de la enseñanza secundaria, es decir, la humanista-científica y técnico-profesional.
Los nuevos prototipos de pruebas evalúan competencias y habilidades que son centrales en el currículo escolar de 7° Básico a 2° Medio, y que, según los análisis son relevantes para un desempeño exitoso en la educación superior.
Desde el Demre aseguraron que los estudios ratificaron que con las mediciones propuestas había una reducción significativa de las brechas de género, socioeconómicas y de educación técnico-profesional y científico-humanista.
“El caso en que más se revela esta reducción es en los resultados de Matemática entre alumnos de colegios particulares pagados y particulares subvencionados, donde la brecha en la PSU era de 157 puntos y con esta nueva prueba es de 91 puntos. En el caso de la prueba de Ciencias, la reducción en este grupo también fue una de las más relevantes: mientras en los resultados PSU la brecha alcanzó los 164 puntos, con esta propuesta se redujo a 102 puntos”, explicaron.