Un análisis en video muestra que Estados Unidos pudo haber atacado por error a un trabajador humanitario cuando su objetivo eran combatientes del Estado Islámico, en el que fue el golpe final estadounidense en Afganistán y que mató a 10 civiles, publicó The New York Times este viernes.
El Pentágono ha dicho que interceptó un ataque planeado por extremistas del Estado Islámico a través de un dron Reaper, el 29 de agosto. Al día siguiente, las tropas de Estados Unidos terminaron 20 años de misión, días después de sufrir un ataque devastador en las afueras del aeropuerto, por donde una multitud trató de escapar de la victoria talibán.
Sin embargo, Aimal Ahmadi, residente en Kabul, le había dicho a la AFP que el golpe mató a 10 civiles incluidos su pequeña hija, sobrinos y a su hermando Ezmarai Ahmadi, quien conducía el automóvil que fue atacado tras estacionar.
The New York Times, analizando las cámaras de seguridad, indicó que el ejército de Estados Unidos pudo haber visto al asesinado Ahmadi y a uno de sus colegas cargando botes de agua y recogiendo una computadora portátil para su jefe.
Ezmarai Ahmadi era un ingeniero eléctrico de la oenegé Nutrición y Educación Internacional, un grupo de asistencia basado en California a quien él mismo, como miles de afganos, había solicitado reubicación en Estados Unidos.
Funcionarios de Estados Unidos aseguran que una explosión más grande tuvo lugar después del ataque del dron, lo que probaría que había explosivos en el vehículo.
Sin embargo, la investigación de The New York Times señala que no hay pruebas de una segunda explosión pues solo se notó una abolladura en un portón cercano y ninguna señal clara adicional como paredes destruidas.
Sobre el informe del medio, el portavoz del Pentágono, John Kirby, dijo que el Comando Central de Estados Unidos "continúa evaluando" el ataque, pero advirtió que "ningún otro ejército trabaja más duro para prevenir las bajas de civiles".
"Como el jefe (Mark) Milley dijo, el golpe estuvo basado en una buena labor de inteligencia y todavía creemos que evitó una inminente amenaza para el aeropuerto y para nuestros hombres y mujeres que siguen sirviendo allí", añadió Kirby, refiriéndose al más alto general Estados Unidos.