Entre el 30 de noviembre y el 1 de diciembre se llevará a cabo la cumbre del G20 en Argentina, siendo el primer país de Sudamérica en organizar esta importante reunión de presidentes de diferentes partes del mundo.
Por eso es que los mecanismos de seguridad transandinos se encuentran operando 24/7 para velar por la integridad de los jefes de Estado y sus comitivas. Uno de los primeros en llegar a suelo trasandino fue Emmanuel Macron junto a su esposa, Brigitte Macron.
El dignatario vivió un incómodo e insólito momento en la losa del aeropuerto de Ezeiza. Cuando descendieron del avión se encontraron con un desolado panorama ya que no había nadie que los recibiera como de costumbre en este tipo de eventos. Razón por la cual bajaron de la aeronave siendo saludados sólo por un par de trabajadores del terminal aéreo.
Luego caminaron por la alfombra roja hacia el automóvil que los trasladaría hasta el hotel que los recibirá durante el desarrollo de la cumbre del G20.
Incómodo momento que minutos después tuvo la llegada de la vicepresidente Gabriela Michetti, quien llegó a recibir al presidente galo y explicó a TN por qué el retraso en la realización del protocolo de recibimiento.
"Pasó algo raro ahí. Nosotros estábamos con una persona de protocolo de cancillería y con el embajador de Francia y el vicecanciller. Nosotros teníamos que esperar que nos dijeran 'ahora', estaba todo cronometrado, en teoría. Y cuando nos dijeron 'ahora' vamos y cuando llegamos el Presidente ya se estaba metiendo en el auto", comentó la vicepresidenta.