El primer ministro británico Boris Johnson recurrió a hablar de la caricatura infantil Peppa Pigtras quedarse en blanco en medio de una intervención realizada en la Confederación de la Industria Británica.
Se trata de un evento en el cual la autoridad europea se reunió con diversos empresarios, donde se analizaron aspectos relevantes de materia económica, como impuestos y regulaciones.
Sin embargo, el primer ministro sufrió un impasse con sus documentos, por lo que se vio forzado a interrumpir su intervención mientras buscaba información en sus notas.
Fue entonces que decidió hablar de Peppa Pig y su experiencia personal con la caricatura.
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"Ayer visité, como todo el mundo debería, el Peppa Pig World. ¿Alguno ha estado ahí? Me encantó. Es mi tipo de lugar: Tiene calles muy seguras, disciplina en las escuelas, énfasis en los nuevos sistemas de transporte público", señaló frente al empresariado.
"Me sorprende que no hayan estado allí. Quién hubiera creído que un cerdo que parece un secador de pelo o posiblemente un secador de pelo al estilo Picasso, un cerdo que fue rechazado por la BBC, ahora se exportaría a 180 países con parques temáticos tanto en Estados Unidos como en China", agregó al respecto.
Tras conocerse el caso, la propia BBC salió a desmentir a la autoridad británica, señalando que su discurso fue caótico y que la BBC no rechazó a Peppa Pig.