Uruguay limitará el uso de las bolsas plásticas, después de que el Senado aprobara este miércoles una ley que desestimula su utilización. La nueva norma legal alcanza a todas las bolsas plásticas utilizadas para contener y transportar productos y bienes que sean entregadas a un consumidor en cualquier punto de venta o de entrega.
La ley prohíbe la fabricación, importación, distribución, venta y entrega de las bolsas plásticas que no sean biodegradables o compostables, en este caso, degradables dentro de una cierta cantidad de tiempo y bajo ciertas condiciones. Habrá algunas excepciones, como el transporte de pescado y de carne que requieren un envasado en plástico, pero el usuario común de comercios deberá pagar la bolsa, algo que no ocurre actualmente, ya que se entregan sin costo.
Se impondrá a los comercios la obligatoriedad de promover y participar en campañas de difusión y concientización a la población sobre el uso responsable y racional de bolsas plásticas y su impacto en el cuidado del ambiente. El objetivo que impulsó el Gobierno apunta a desarrollar una serie de acciones que minimicen el uso de las bolsas plásticas, ya que se calcula que en el país se consumen 1.200 millones de bolsas por año.
Según el director de Medio Ambiente, Alejandro Nario, se trata de "un número demasiado alto" para el país. La iniciativa entrará en vigor una vez que sea promulgada por el Poder Ejecutivo, lo que se descuenta. Desde ese momento Uruguay será el segundo país de Sudamérica, después de Chile, que toma medidas contra el uso ilimitado de las bolsas de plástico.
En el mundo ya son 60 los países que limitan el uso de bolsas de plástico debido a las consecuencias ambientales que ha provocado su utilización, generando gigantescas islas de basura en diversas partes del mundo.