El informe final del caso del niño muerto a manos de un caimán en un centro hotelero de Disney en Orlando, Estados Unidos, reveló el pasado lunes que varias personas habían visto a un reptil en las aguas del resort y que al menos uno informó a un empleado del lugar.
El resultado de la investigación fue difundido por la Comisión para la Conservación de la Fauna y la Pesca (FWC) de Florida y la oficina del alguacil del condado de Orange, según EFE.
Allí se detalla que el menor de dos años, murió el 14 de junio por “traumatismo craneoencefálico y ahogamiento” tras ser arrastrado por un caimán.
El hecho ocurrió cuando él y su familia, procedente del estado de Nebraska, disfrutaban la velada en la orilla de un lago artificial del exclusivo Grand Floridian Resort and Spa de Disney, cuando un caimán emergió del lago y atrapó al niño.
El padre de la víctima se lanzó al agua pero no logró rescatar al pequeño de las mandíbulas del animal.
La búsqueda del niño comenzó inmediatamente después del ataque. Un equipo de unas 50 personas fue desplegado en la operación.
"El examen de los mordiscos que mostraba el cadáver del niño arrojó que el menor había muerto a causa de las graves heridas sufridas por un caimán", agrega el informe.
Además, se señala que el lugar donde ocurrió la tragedia no tenía ningún aviso que prohibiera bañarse, pese a tratarse de un lugar donde los caimanes son comunes.
También se agrega la declaraci+on de un turista de Carolina del Norte, Shawna Giacomini, quien dijo que antes del ataque sus dos hijas vieron a un caimán en la orilla.
"La hija mayor se lo dijo a un empleado del centro, coordinador de películas", señala el informe. Pero cuando regresaron de avisar, el ataque ya se había efectuado. Es decir, la alerta se emitió sólo minutos antes del ataque.