AFP
El presidente estadounidense Donald Trump propondrá formalmente este jueves un presupuesto federal que incluye un alza en la partida destinada a la defensa, acompañada de recortes en las reservas a la diplomacia y la protección ambiental, informó la Casa Blanca.
El documento, que será enviado formalmente al Congreso, establece un aumento de 54.000 millones de dólares al presupuesto destinado a la defensa, un sector que ya posee un presupuesto equivalente a la suma de las siete naciones que le siguen en materia de armamento.
En tanto, el proyecto de presupuesto determina un enorme recorte de aproximadamente 28% en los recursos destinados al Departamento de Estado, en particular en las reservas para la ayuda internacional al desarrollo.
Esta decisión en particular deberá tener efectos inmediatos en la contribución, por ejemplo, de agencias de las Naciones Unidas, con la posibilidad de un efecto de alcance global.
Al mismo tiempo, el proyecto de presupuesto deberá separar un paquete de unos 4.000 millones de dólares para la construcción del controvertido muro en la frontera con México.
Desde la campaña electoral del año pasado, Trump ha reiterado que México pagará por los costos del polémico muro, aunque las autoridades mexicanas ya descartaron cualquier posibilidad de que eso pueda ocurrir.
Los primeros estudios sobre el costo del muro que Trump desea construir indican que la cuenta será de por lo menos 15.000 millones de dólares, aunque podría llegar a más de 20.000 millones.
Este proyecto para ser enviado al Congreso, sin embargo, cubre apenas una fracción del presupuesto federal de aproximadamente 3,8 billones de dólares, dominado por los gastos de salud y pensiones, entre otros.
El documento aún será el objeto de furiosas negociaciones por cada párrafo del texto.
Por eso, más que un producto acabado el proyecto de presupuesto de Trump debe ser visto fundamentalmente como una declaración de sus prioridades políticas.
Un mensaje a su base
Para el jefe de la oficina de Presupuesto en la Casa Blanca, Mick Mulvaney, se trata de un "presupuesto de 'hard power', no uno de 'soft power'".
El funcionario dijo que para la confección del presupuesto su equipo repasó decenas de discursos de Trump, para enviar una señal a sus electores mostrando que el presidente es un "hombre de acción" y no un "político tradicional".
De esta forma, el presidente republicano busca recurrir a su base para dejar de lado un escenario marcado por constantes controversias por sus quejas públicas en la red Twitter, la alegada interferencia de Rusia en las elecciones del año pasado y la amarga reacción del Congreso a su propuesta de reforma del sistema de salud.
De acuerdo con el instituto Gallup, Trump exhibe un nivel de aprobación de 40%, el nivel más bajo para cualquier presidente estadounidense de la era moderna con apenas semanas en la Casa Blanca.
Pero su retórica sobre seguridad le trajo muchos votos. Un sondeo realizado por Economist/YouGov mostró que un 51% de los republicanos cree que Estados Unidos será un lugar más seguro al fin de su mandato.
Este proyecto de presupuesto también servirá como una señal para el mundo de los efectos reales de la decisión de Trump de poner a "Estados Unidos en primer lugar".
En una reciente carta abierta, más de 120 generales y almirantes recordaron a la Casa Blanca una frase pronunciada por el ahora secretario de Defensa, Jim Mattis: "Si no se brinda presupuesto suficiente al Departamento de Estado, es necesario comprar más munición".