El Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo el viernes que había hablado con la familia de George Floyd, el negro que murió mientras estaba siendo arrestado, un hecho que provocó fuertes disturbios.
"Hablé con miembros de la familia, gente excelente", dijo en la Casa Blanca. Trump fue criticado por comentarios anteriores en Twitter en los que llamaba "matones" a los manifestantes y advertía que "cuando comiencen los saqueos, comenzará el tiroteo".
En sus últimos comentarios, dijo que apoyaba las protestas pacíficas. Sin embargo, advirtió: "no podemos permitir que una situación como la que ocurrió en Minneapolis conduzca a más anarquía y a un caos sin ley".
"Entiendo el dolor, entiendo el dolor. Esta gente realmente ha pasado por mucho. La familia de George tiene derecho a la justicia y la gente de Minnesota tiene derecho a vivir a salvo", afirmó.
El alcalde de Minneapolis Jacob Frey declaró el viernes un estricto toque de queda en la ciudad estadounidense, tras tres noches de disturbios por la muerte de Floyd.
El alcalde Jacob Frey ordenó que todas las personas se retiren de las calles a partir de las 8:00 pm (0100 GMT del sábado) hasta las 6:00 am, excepto miembros de la policía y de la guardia nacional desplegada para mantener la paz, así como el personal de bomberos y médico.
El policía acusado de matar a George Floyd, de 46 años, al someterlo con las rodillas en el cuello, fue arrestado y acusado de asesinato este viernes.