Trump expone su plan para rebajar impuestos, pero sin entregar detalles
Por AFP
Donald Trump instó al Congreso a rebajar los impuestos a empresas y particulares, pero sin dar detalles sobre su reforma fiscal ni cómo financiar la reducción de ingresos al erario.
"No tenemos opción. Debemos bajar los impuestos", dijo en Springfield, Misuri, en la primera etapa de una gira destinada a promover su prometida reforma fiscal.
"Le pido a todos los miembros del Congreso -demócratas, republicanos e independientes- a apoyar una reforma fiscal pro-estadounidense (...) que permita destinar más dinero a los bolsillos de los trabajadores", dijo.
Trump no dio pistas sobre como se financiarían los gastos del gobierno reduciendo los impuestos.
Si bien los republicanos son mayoría en ambas cámaras, no todos tienen la misma posición sobre este tema y se esperan grandes discusiones. Varios legisladores republicanos se oponen a un eventual aumento del déficit fiscal.
"Nuestro código tributario es autodestructivo y ha costado millones y millones de empleos estadounidenses y miles de millones de dólares", afirmó Trump.
Recordó que la última reforma tributaria fue en 1986 durante la presidencia del también republicano Ronald Reagan e indicó que Estados Unidos hoy precisa un texto "simple, equitativo y fácil de entender".
Para Trump la reforma fiscal permitiría alcanzar la meta de crecimiento económico de 3% que ha dicho que es su objetivo. El presidente no solo insistió con eso, sino que, además, afirmó que Estados Unidos puede crecer "bastante más".
"En lugar de exportar nuestros empleos, exportaremos nuestros productos", sostuvo.
La reforma es técnica y políticamente muy compleja pero Trump espera que se adopte este mismo año.
No obstante están pendientes varias preguntas: ¿Cuál será la magnitud exacta de la reforma del código fiscal? ¿La reducción a 15% del impuesto a las sociedades, anunciada por la Casa Blanca en abril, se mantiene o será finalmente revisada al alza?.
En su discurso de Springfield, Trump fue muy prudente en este tema crucial. "Idealmente desearíamos llegar a una rebaja de 15%", se limitó a decir.
La tasa de imposición a las empresas deberá ser "tan baja posible como para estimularlas a crear empleos", dijo recientemente Gary Cohn, consejero económico de Trump y uno de los arquitectos de la reforma en ciernes.