El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, desplazó a Mira Ricardel, la asesora adjunta de seguridad nacional de su cargo. El martes, en una actitud poco convencional, Melania Trump había declarado a través de su portavoz que Ricardel ya no se merecía seguir trabajando para la Casa Blanca.
"Mira Ricardel seguirá apoyando al presidente al abandonar la Casa Blanca y emprender una transición a un nuevo cargo dentro del Gobierno", dijo la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Huckabee Sanders, en un comunicado.
"El presidente está agradecido por el servicio constante de la señora Ricardel al pueblo estadounidense y por su férrea defensa de sus prioridades de seguridad nacional", agregó la portavoz.
Sanders no precisó cuál será el nuevo cargo de Ricardel, que hasta ahora era la "número dos" del asesor de seguridad nacional de Trump, John Bolton, y ocupaba como tal un destacado papel en los debates sobre política exterior en el Gobierno.
Según varios medios de comunicación estadounidenses, Ricardel se enfrentó con el personal de la primera dama por una cuestión relacionada con el viaje de Melania a África, en octubre pasado.
Ricardel, de 58 años, asumió el cargo de asesora adjunta de Seguridad Nacional en mayo, un mes después de que Trump nombrara a Bolton para reemplazar al general H.R. McMaster.
La inédita petición de la primera dama llegó en medio de los rumores que indican que Trump estaría considerando despedir a su jefe de Gabinete, John Kelly, y a la secretaria de Seguridad Nacional, Kirstjen Nielsen, entre otros.