Cinco obreros de la construcción fueron encontrados muertos este sábado, al día siguiente de que se derrumbara parcialmente una obra en un colegio de la ciudad belga de Amberes.
Los cuerpos de los dos trabajadores que faltaban fueron retirados de entre los escombros por la tarde, informaron los bomberos de Amberes, a 40 km al norte de Bruselas.
El rey de los belgas Felipe y el primer ministro Alexander De Croo acudieron al lugar este sábado.
De las cinco víctimas, una era originaria de Portugal y otra de Rumania, informó la policía a la prensa local.
Se desconoce la nacionalidad de las restantes pero en el momento en el que aún faltaban tres trabajadores los socorristas habían dicho que estaban buscando a otros dos portugueses y un ruso.
Los obreros trabajaban para un subcontratista de la constructora Democo, según la agencia de noticias Belga.
"Todos los empleados están devastados", declaró a esta agencia Frederik Bijnens, director general de Democo. "Ahora que los servicios de emergencia han hecho cuanto podían, comenzará una investigación pormenorizada para identificar la causa del accidente".
Otras nueve personas resultaron heridas, tres de las cuales se hallan en cuidados intensivos pero no en estado crítico, tuiteó el servicio de bomberos.
No había alumnos en el interior del colegio puesto que se hallaba en construcción.