La Tierra ha sido testigo de un evento astronómico poco común: una espectacular tormenta solar que ha generado auroras anaranjadas inusuales, visibles en el Reino Unido y Canadá. Estas auroras, descritas por los testigos como un "espectáculo increíble", se deben a la interacción de las partículas solares con la magnetosfera terrestre. El color de las auroras depende de con qué elemento interactúe y en qué parte del cielo se encuentren. Las auroras de color rojo se suelen producir a mayor altura que las verdes.
El fenómeno de las auroras verdes es extremadamente raro. En el caso actual se dio por la superposición de bandas verticales de auroras rojas y verdes, creando la coloración anaranjada.
Trilogía solar
Tamitha Skov, reconocida física del clima espacial, junto con la NOAA y la NASA, ha explicado en la plataforma X que esta tormenta solar es parte de una serie de tres eyecciones de masa coronal (CME) dirigidas hacia la Tierra. La reciente tormenta, parte de esta "trilogía solar", ha sido modelada por la NASA, anticipando efectos significativos, incluyendo espectaculares auroras boreales y posibles interrupciones en las comunicaciones de radio y GPS, particularmente en el hemisferio sur.
Consecuencias en las telecomunicaciones
A pesar de que los efectos esperados en las comunicaciones de radio y GPS son mínimos, según Skov, la NOAA ha advertido sobre posibles interrupciones en algunas áreas, especialmente en el Pacífico Sur. Estas consecuencias son un recordatorio de cómo las tormentas solares pueden afectar las tecnologías terrestres, aunque esta vez, los impactos previstos son considerados menores.
Este evento también subraya la importancia de la investigación continua en el campo de la física del clima espacial. Mientras los científicos estudian las diferencias y las interacciones entre las erupciones y tormentas solares, estos fenómenos ofrecen una oportunidad única para entender mejor cómo los cambios en el ambiente solar afectan nuestro planeta. La colaboración entre agencias como la NASA y la NOAA es crucial para prepararnos y mitigar los efectos de futuras tormentas solares en nuestra tecnología y comunicaciones.
Mientras los observadores disfrutan de la belleza de las auroras anaranjadas, un fenómeno celestial tan hermoso como raro, los científicos y tecnólogos permanecen alerta a las repercusiones potenciales de estas tormentas solares en nuestro mundo interconectado.
