El tifón Goni, que provocó al menos 26 muertes en Filipinas, se encontraba este lunes al sur de Japón, donde las fuertes ráfagas de viento arrastraron vehículos y arrancaron postes eléctricos.
Las compañías aéreas japonesas anularon más de 100 vuelos y miles de hogares estaban privados de electricidad en las islas del extremo sur del archipiélago.
Este 15º tifón de la temporada en Asia se encontraba a las 13H00 locales (4H00 GMT) a 140 km al noroeste de la isla de Okinawa, en el extremo suroccidental de Japón, según la agencia meteorológica nipona.
La tormenta se desplaza en dirección noreste a 35km/h con vientos de hasta 252 km/h, según la agencia.
Por el momento, el tifón dejó cinco heridos leves en la isla de Ishigakijima (extremo sur), según la agencia japonesa de gestión de catástrofes naturales, y unas 21.400 viviendas del archipiélago de Okinawa sufrieron cortes de electricidad, de acuerdo con la compañía regional.
El tifón devastó el norte de Filipinas, donde provocó la muerte de al menos 26 personas, entre ellas 13 menores sepultados tras un corrimiento de tierras y una niña de cinco años arrastrada por la crecida de un río, según el último balance de los equipos de rescate.
Cada año pasan por Asia entre 20 y 30 tifones.