La ciudad de Charlotte, en Carolina del Norte, está en estado de emergencia, con 44 personas detenidas, varios heridos y lleva dos días seguidos de violentas protestas.
El motivo: la muerte del afroestadounidense Keith Lamont Scott, baleado por la policía el martes.
Las fuerzas de seguridad locales insisten en que el fallecido portaba un arma; la familia Scott y testigos sostienen que lo que llevaba en la mano era un libro.
Dos días después de su muerte, todavía no hay evidencias públicas que comprueben alguna de las versiones.
La policía, además, dijo que no hará público el video del incidente hasta que no tenga una "razón convincente", pero admitió que la filmación no brinda evidencia "definitiva" de que Scott portara un arma.
El fiscal Justin Bamberg anunció que la familia de Scott podrá revisar las imágenes en la noche de este jueves.
"Por ser negro"
El reporte policial del arresto señala que Scott, de 43 años, fue visto bajando de su auto con un arma en la mano el martes por la tarde.
La familia del fallecido señala, en cambio, que el llevaba un libro en la mano e iba rumbo a la parada de un bus.
Los oficiales que lo abordaron se encontraban en la zona para cumplir una orden de arresto para otra persona.
La policía dijo que Scott se negó a soltar su arma y fue disparado cuando se convirtió en una "amenaza inminente" para la vida de los oficiales.
Bentley Vinson, el policía que le disparó, no llevaba uniforme en ese momento.
Inmediatamente después de lo sucedido, la hija de Keith Scott realizó una transmisión por Facebook Live en la que acusó a los oficiales de dispararle "por ser negro".
"Yo no vi eso"
El jefe de policía de Charlotte, Kerr Putney, es una de las personas que tuvo acceso la filmación del martes y afirmó que "el video no da una evidencia visual definitiva y absoluta de que la persona (Scott) apuntaba con un arma".
"Yo no vi eso en el video que revisé", concluyó.
Sin embargo, Putney añadió que toda la evidencia acumulada respalda la versión policial.
Tahesia Williams, quien vio todo desde su balcón el martes, sostiene que Scott murió pese a cumplir con las órdenes que recibió de los policías.
Horas después comenzaron las protestas en la ciudad que se repitieron el miércoles con violencia.
10 manifestantes resultaron heridos por los enfrentamientos del miércoles, uno de ellos todavía en situación crítica.
Cinco policías también tuvieron que recibir atención médica. Charlotte fue declarada en estado de emergencia.
La familia de Scott hizo conocer que no apoya las muestras de violencia, pero que se debe respetar el "derecho de protesta" de la gente.
La verdad todavía no se conoce.
"Tenemos más preguntas que respuestas sobre la muerte de Keith", lamentó su esposa, Rakeiya Scott.